Jon Koldo, una banda unida por la amistad y la salsa

Jon Koldo, el grupo navarro de salsa, ha sido hoy el encargado de llenar de ritmo latino la Plaza del Ayuntamiento de Pamplona, a las 17.50 horas, antes de que la ciudad encienda oficialmente sus luces navideñas por el día de San Saturnino.

La banda, que nació casi sin pretensiones, desde la amistad y la pasión compartida por la salsa, se convierte hoy en uno de los nombres más reconocibles del ambiente festivo joven de Navarra y contagia a los pamploneses con su espíritu de amistad y alegría.

Jon Koldo es, ante todo, una historia de amistades que se cruzan, de horas de ensayo y de una pasión compartida por la música latina. El grupo nace en el Conservatorio Superior de Pamplona, donde un grupo de amigos y compañeros de clase empieza a juntarse sin más pretensión que tocar la música que realmente les gusta. “Empezamos por puro disfrute, sin pensar en escenarios grandes ni en nada de esto”, recuerda Izarbe Loras, pianista del grupo.

Así, el grupo está integrado por Maialen Areta (voz), Elena Vidal (voz), Sofía Pino (bajo), Izarbe Loras (piano), Ionan Peñalver (batería), David Olabarrieta (percusión), Eduardo Marín (percusión), Unai de Esteban (trombón), Daniel Miguel (saxofón) y Aimar Palacios (trompeta).

El propio nombre del grupo refleja ya esa raíz musical que los une. Jon Koldo es un homenaje directo a Juan Luis Guerra, uno de los grandes referentes de la música latina. “Su música nos ha influido muchísimo a todos. Tiene ese equilibrio entre ritmo, calidad y emoción que queremos reflejar también en el grupo”, explica Izarbe.

A base de ensayos constantes y de ir construyendo un repertorio propio a partir de versiones muy trabajadas, llegó casi de manera natural el primer concierto en las fiestas del pueblo de una de las integrantes. “Aquella actuación fue un punto de inflexión”, señala la pianista.

A partir de ese momento, la trayectoria de Jon Koldo creció de forma progresiva y muy ligada al boca a boca. “Nunca hemos tenido una gran promoción detrás; todo ha sido porque la gente nos recomienda después de vernos tocar”, destaca Izarbe.

De esta forma, pese al aumento de conciertos y a la mayor visibilidad, los integrantes tienen claro que la esencia del proyecto no ha cambiado. Siguen entendiéndolo como un grupo de amigos que se reúne para disfrutar haciendo música. “Eso es lo más importante para nosotros. Mientras sigamos sintiéndolo así, todo lo demás viene solo”, afirma Izarbe.

Hoy, la historia del grupo suma un nuevo capítulo en un escenario muy simbólico. Jon Koldo participa a las 17.50 horas, en la Plaza del Ayuntamiento de Pamplona, dentro del espectáculo de lunes y sonido. Para la banda, actuar en pleno corazón de la ciudad supone un reto especial.

“Impresiona tocar en una plaza tan grande y en un día tan señalado, pero también nos hace muchísima ilusión”, reconoce Izarbe. “Hemos preparado un repertorio muy energético, para que la gente empiece a disfrutar desde el primer minuto”, adelanta la pianista.

Desde aquellos primeros ensayos casi improvisados en el Conservatorio hasta las plazas llenas de gente, Jon Koldo va construyendo su camino sin grandes atajos y sin perder su carácter cercano.

Y quizá ahí reside buena parte de su éxito: en haber sabido crecer sin dejar atrás la idea inicial que les une alrededor de la música. Así, Jon Koldo hoy hace lo que mejor sabe hacer: poner ritmo, cercanía y alegría desde las calles hasta los corazones navarros.