Este sábado se celebró en el Casco Viejo de Pamplona una manifestación contra la conversión en viviendas turísticas de los pisos del número 18 de la calle Mercaderes, un proyecto de la empresa Vidaurre Group que podría implicar el desalojo de las personas que viven actualmente en el edificio. La movilización fue organizada por el Sindicato Socialista de Vivienda de Iruñerria, que denunció el impacto del turismo en el barrio.
La marcha comenzó a las 18.00 horas en la plaza de Recoletas y recorrió distintas calles del Casco Viejo hasta finalizar en Mercaderes, donde las personas participantes corearon consignas contra el negocio turístico y señalaron mediante carteles y pegatinas varios establecimientos vinculados a este sector. El sindicato advirtió que el proyecto de Mercaderes 18 contempla la creación de once nuevos pisos turísticos en un barrio que oficialmente cuenta con 225 viviendas de este tipo.
Al término de la manifestación, vecinas y vecinos del edificio afectado tomaron la palabra para agradecer el apoyo recibido en los últimos meses y defendieron la lucha colectiva como respuesta a los intentos de desalojo. Subrayaron que se trata de una movilización en defensa del derecho a la vivienda y contra las consecuencias del negocio inmobiliario y turístico en el Casco Viejo.
La convocatoria contó con el respaldo de diversos colectivos y organizaciones sociales, entre ellos Nahiko AZ, el Movimiento Juvenil del Casco Viejo, GKS Alde Zaharra, Haritu, la PAH de Berriozar, Martes Al Sol, Dar Etxea, PIM-MIG, Salhaketa Nafarroa, CGT-LKN Nafarroa y la CNT de Iruñea.
Desde el Sindicato Socialista de Vivienda se señaló que lo que ocurre en Mercaderes no es un caso aislado, sino un ejemplo de un modelo de barrio orientado al turismo. Recordaron que estos pisos fueron los primeros apartamentos turísticos que se abrieron en el Casco Viejo, en 2012, entonces gestionados por el Hotel Avenida, y denunciaron que varias empresas obtienen beneficios económicos destinando viviendas al uso turístico.
El sindicato criticó también la política municipal en materia de licencias, al recordar que, pese al anuncio del Ayuntamiento de Pamplona de suspender nuevas autorizaciones para viviendas turísticas a finales de 2024, se aprobaron las solicitudes que ya estaban en tramitación, entre ellas la de Mercaderes 18. Advirtieron además que continúan proyectándose nuevos alojamientos turísticos en el Casco Viejo mientras persisten situaciones de precariedad residencial y personas sin hogar en la ciudad.
Por último, la organización hizo un llamamiento a mantener la movilización para frenar la expansión de las viviendas turísticas y reclamó un modelo que garantice el acceso a una vivienda digna para la clase trabajadora.