MADRID - Federico Trillo, ministro de Defensa durante la época de José María Aznar, negó “rotundamente” que su Ejecutivo manipulara u ocultara datos sobre la posible existencia de armas de destrucción en Irak, si bien aseguró que la información que recibió el Gobierno español al respecto “no fue completa ni verdadera”.

“Lo que se nos contó es lo que contamos”, afirmó en declaraciones a Onda Cero, donde incidió en que finalmente no se encontraron las armas a pesar de que “se les dijo que estaban” ahí. “Aznar sí ha reconocido que tuvimos o nos indujeron a un error”, puntualizó.

La información sobre la existencia de armas de destrucción en Irak fue la base para que varios países participaran en una intervención militar en dicho país. Pero el actual embajador de España en Londres negó que España participase en dicha guerra.

“Era una decisión para todos grave, por eso España decidió no estar en la guerra ni ser combatiente, sino prestar ayuda a los aliados”, señaló, aunque admitió que sí apoyó la intervención militar, al igual que “40 países más”.

españa “no fue a la guerra” El exministro de Defensa reaccionó así después de ser preguntado por las conclusiones del informe Chilcot que analiza la participación de Reino Unido en la guerra de Irak y cuestiona la actuación del entonces primer ministro, Tony Blair, y del expresidente del Gobierno español José María Aznar.

“España no estuvo en la guerra, no envió combatientes a Irak. Deliberadamente y parlamentariamente decidió lo contrario”, destacó, para después explicar que España llegó al conflicto cuando ya había caído Bagdad. Asimismo, incidió en que España envió “un paquete de ayuda humanitaria, con un buque especial y otro de apoyo”. “No se disparó un tiro en contra de nadie”, apuntó.

En cualquier caso, cree que el Gobierno de Aznar y el PP “tuvieron las consecuencias políticas más tremendas que se han tenido por ningún otro país” a pesar de que “la implicación de España no era precisamente la mayor”. Además, subrayó que “se trabajó al máximo” para que la solución “pacífica se produjera”.

Además, resaltó que España se manifestó en contra del posterior tratamiento dado a Irak desde la ONU. “Vimos que planes para desarrollo y reconstrucción de Irak estaban siendo equivocados y lo dijimos”, sostuvo.

“El apoyo fue político, sin dar en ningún momento la espalda al Parlamento”, afirmó el exministro, que fue tajante al asegurar que ni “se ocultó ni se manipuló información. Rotundamente no”, dijo.

Tras la cumbre de las Azores (EEUU, España y Reino Unido), Aznar justificó la invasión en que el Gobierno de Sadam Hussein era una amenaza para sus vecinos y para los propios países occidentales. El 20 de marzo de 2003, sin que mediara declaración de guerra por alguna de las partes, comenzó el ataque de la coalición contra Irak.

retirada de tropas Un año después, tras la victoria de José Luis Rodríguez Zapatero en las elecciones generales de 2004, el Gobierno socialista anunció la retirada de las tropas españolas en Irak, cumpliendo una de las promesas estrella de su programa durante la campaña electoral.

Trillo también se refirió a las consecuencias que puede tener la salida de Reino Unido de la Unión Europea y se mostró partidario de ofrecer ventajas fiscales a los inversores británicos para que consideren establecer sus sedes en España con el objetivo de seguir perteneciendo a la UE.

El exministro se mostró convencido de que en Reino Unido “habrá debate parlamentario” para conformar una plataforma para la negociación de la salida del país, pero descartó que los británicos den “una vuelta atrás” en su decisión de abandonar la UE. - Efe/E.P.