pamplona - El Gobierno cree que las elecciones generales siempre tienen “efectos terapéuticos” en los partidos que salen derrotados, y bajo esta perspectiva, asume que la opinión del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, sobre posibles pactos, es ahora “más razonable”, en palabras de la ministra portavoz, Isabel Celaá.
Eso sí, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Celaá negó cualquier acuerdo de Gobierno con la formación naranja y aseguró que los socialistas también “han escuchado” la voz de su militancia, que en la noche electoral advirtió desde la calle Ferraz al líder socialista, Pedro Sánchez, que se sentiría defraudada si finalmente opta por un pacto de investidura o un Ejecutivo de coalición con Rivera.
La también ministra de Educación comentó en dos ocasiones durante su intervención el peso como “terapia” que tienen las elecciones para los partidos a la hora de fijar sus prioridades para posibles pactos o para determinar su posición ante una hipotética investidura de Pedro Sánchez.
Celaá también hizo referencia a la posición de la CEOE, que ayer reclamó al PP y Ciudadanos la abstención en una elección de Sánchez. “Ellos tomarán sus decisiones”, se limitó a apuntar sobre el requerimiento de la patronal, si bien hizo notar que ambas formaciones ahora “están en liza para ver quién llena el campo de la derecha”.
En todo caso, Isabel Celaá tiene claro que la oposición ha recibido una “importante reprimenda” por parte de la sociedad española en los comicios, de los que en cambio se desprende una “lectura clara” de victoria socialista. - D.N.