Ha habido un cambio de rol de Geroa Bai en el Gobierno. De liderar un Ejecutivo mayormente técnico a actuar como socio de un Gabinete con una clara inclinación política. Una transición que la formación vasquista ha asumido sin mayores dificultades, pero que en ocasiones requiere de una reafirmación interna. “Estamos en el Gobierno para dar continuidad al gran proyecto de transformación que llevamos a cabo en 2015 con el liderazgo de Uxue Barkos”, defendió ayer el vicepresidente José Mari Aierdi, uno de los principales valedores de la alianza con el PSN, y que dos años después ofrece más luces que sombra.
Aierde se hizo tres preguntas durante el año de ayer. A la primera, “cuál es el papel de Geroa Bai”, respondió con una apuesta por la continuidad del camino iniciado en 2015. “Nunca hemos querido hacer una aportación cuantitativa, sino cualitativa”, defendió el vicepresidente, que señaló que el papel de Geroa Bai no es gestionar departamentos “con un importante caudal económico” sino aquellos que “tienen una mayor incidencia cualitativa en el proceso de transformación del modelo productivo y social”.
Era la respuesta a la segunda de las preguntas, la impronta de Geroa Bai en el Gabinete de María Chivite. “Somos palanca de cambio en aquellos elementos que son estructurales. En las políticas de vivienda, en las estrategias de sostenibilidad, en la apuesta por la innovación y el emprendimiento empresarial, el plurilingüísmo o el equilibrio territorial”, defendió Ayerdi, que lamentó no poder “mover” a su socio todo lo que quieran en materia lingüística, pero que destacó todos los avances logrados en el fomento del euskera.
Un relato que dio paso a la tercera de las preguntas, el proyecto de futuro que debe ofrecer Geroa Bai a la sociedad navarra. “Recuerdo las palabras de Miguel Laparra, que defendía que eran necesarios 40 años para hacer efectivo el cambio”, señaló Aierdi, que insistió en que todavía queda mucho camino por recorrer. “Lo vemos todas las semanas en el Parlamento en la bancada de la derecha, en su manera de comunicar y de entender la convivencia”, señaló Aierdi, que entre los retos para los próximo meses apuntó a los presupuestos de 2022 y a la gestión de los fondos europeos, que tendrán que negociar dentro del Gobierno del PSN, y también a la asunción de nuevas competencias. “Tráfico es un hito. Un hito muy importante, pero un hito en el camino. Tenemos la capacidad de gobernar por nosotros mismos, y tenemos que seguir avanzando”, argumentó.
“Tráfico es importante, pero es solo un hito en el cambio. Tenemos que seguir avanzando”
Vicepresidente
