Solana defiende el trabajo en memoria histórica "frente a la ola reaccionaria y negacionista"

"Defendemos que la memoria es más que pasado, es, ante todo, una cuestión de futuro estrecha e indisolublemente ligada a la promoción de una cultura de paz y de derechos humanos", ha señalado Solana, en un acto electoral junto a la puerta de la antigua cárcel de Pamplona, acompañada por la consejera de Relaciones Ciudadanas del Gobierno foral, Ana Ollo.

María Solana ha asegurado que "desde Geroa Bai hemos llevado la memoria a una posición de centralidad en nuestra acción política y el punto en el que nos encontramos es un reflejo de esa convicción y de esa firme acción institucional iniciada en Navarra en 2015".

Solana, crítica con la ley de Memoria Democrática

Sin embargo, ha sido crítica con la ley estatal de Memoria Democrática, considerando que es "una oportunidad perdida, una norma que se ha quedado corta en aspectos fundamentales, uno de ellos el periodo temporal que abarca, que se detiene en el año 1983, fecha a todas luces insuficiente si lo que se pretendía es según sus propios promotores cerrar una deuda de la democracia española con su pasado". "Quedan fuera de su ámbito de aplicación casos tan significativos y dolorosos para la sociedad navarra como la muerte en 1985 de Mikel Zabalza", ha asegurado.

También ha criticado el anteproyecto de ley de información clasificada aprobado por el Gobierno de España para "sustituir a la franquista ley de Secretos Oficiales". Solana ha lamentado que, con la propuesta del Gobierno de España, "se podrían alargar hasta los 65 años los plazos para la desclasificación de los llamados secretos de Estado, demostrando, por tanto, una nula voluntad política para ofrecer la verdad a las familias de las víctimas y menos aún la justicia y la reparación".

Por ello, María Solana ha asegurado que "en Geroa Bai continuaremos trabajando por el necesario relato deslegitimador de todas las violencias, sin equiparaciones, sin diluciones, ni equidistancias".

El fuerte de San Cristóbal

Por su parte, la consejera de Relaciones Ciudadanas, Ana Ollo, ha señalado que "se impone la necesidad de continuar avanzando en la configuración del fuerte de San Cristóbal como espacio referente de memoria", pero ha criticado la mención que hace la ley de Memoria Democrática a este enclave. "Es una mención que pretende supuestamente hacer del recinto un lugar de memoria pero que no garantiza dos condiciones necesarias para ello. La primera, la redacción conjunta entre los Gobiernos de Navarra y de España de un proyecto consensuado con las asociaciones materialistas. Y tan importante como lo anterior, concretar quién va a financiar esta inversión que en un estudio de hace cinco años se valoraba en 35 millones de euros", ha señalado.

A continuación, Ana Ollo ha afirmado que "no entendemos el empeño de algunos en supeditar su futuro a una ley estatal, en lugar de centrarnos en trabajar conjuntamente para conseguir lo que realmente necesitamos, que el Estado se comprometa a financiar íntegramente las obras de rehabilitación del fuerte con carácter previo a su entrega al Gobierno de Navarra, y éste, sí, haría un proyecto memorialista".

La consejera ha criticado también la posición del Gobierno de España respecto al cementerio Las Botellas, "donde reposan los restos de más de 100 presos políticos que murieron en el fuerte". "El proyecto del Gobierno de Navarra para su rehabilitación, con una enmienda presentada por Geroa Bai en el Parlamento, se encuentra con que el Ministerio de Defensa ha denegado los permisos para acondicionarlo, alegando que en su entorno se realizan actividades de instrucción y adiestramiento militar. Son pues muchos los retos que hay que afrontar en esta materia, desde Navarra pero también desde Madrid", ha asegurado.