El Gobierno de Navarra trabaja en su propia mayoría parlamentaria, consolidada tras las últimas elecciones y pendiente de un nuevo equilibro interno que medirá fuerzas en la próxima negociación presupuestaria. Pero sigue de cerca lo que ocurre en Madrid, y confía en que finalmente se consolide también una mayoría política similar a la navarra. Que en España gobierne Pedro Sánchez no es garantía de nada, pero sí un buen punto de partida para un ejecutivo autonómico que depende mucho de sus acuerdos con Madrid. Y que se enfrenta a un escenario en el que buena parte del poder territorial está en manos del PP. “Si hay un Gobierno en España en sintonía política con el de Navarra, mejor que mejor para todos los intereses”, ha defendido este miércoles el vicepresidente y portavoz del Gabinete de Chivite.

Así que la derrota de Feijóo se ha recibido con indisimulada satisfacción en el Palacio de Navarra, que ha seguido el debate que se celebra en el Congreso de los Diputados con “interés político de alto grado” porque “lo que resulte del Gobierno de España ahora en funciones es importante para el Gobierno de Navarra”. “Aunque el toro es toro desde los cuernos hasta el rabo –la votación definitiva será este viernes–, el candidato Núñez Feijóo está abocado al fracaso”, afirma Taberna, que no obstante quiere ser “cauto” porque “las votaciones las carga el diablo”. “Cuando finalice la investidura fallida y larga en el tiempo, surgirá otra candidatura, que ya está anunciada por el presidente Sánchez, que está trabajando de manera discreta y desde el viernes de manera mucho más abierta para que, en torno a su candidatura, pueda haber la renovación de la actual presidencia del Gobierno de España”, confía.

Lo hará con una mayoría muy similar a la que sostiene al Gobierno de Navarra, que “tiene una naturaleza tripartita” y que es “políticamente de izquierdas con un espacio del nacionalismo”. “Si hay un Gobierno en España en sintonía con el de Navarra, mejor que mejor para todos los intereses, no solo los propios de los partidos, sino de Navarra”, defiende el portavoz, que resta importancia a la interinidad del Gobierno central. “Está funcionando con plena sintonía, con sus límites. Uno de ellos es que no ha podido nombrar al delegado del Gobierno en Navarra”, detalla.