El Defensor del Pueblo dispondrá, por segundo año consecutivo, de un presupuesto que supera el millón de euros. El Parlamento de Navarra está a punto de aprobar las cuentas del organismo –el segundo más importante que depende de la Cámara; el primero es Comptos– para el año que viene, cuando se propone que el gasto sea de 1.118.400 euros. La cifra es superior –en algo más de un 4%– a la que se presupuestó para el año 2023, cuando la Cámara decidió compensar la escalada de precios con una subida presupuestaria. De esta manera, la cifra final se quedó en los 1.073.900 €, lo que suponía una subida del 22,9% con respecto al año anterior. Una subida que también contempló algunos cambios tras la llegada del nuevo defensor del pueblo, Patxi Vera, que acometió modificaciones de grado, subidas salariales, complementos de exclusividad para algunos puestos y abordó la adecuación a la ley de estabilización. Ahora, parte de la subida se explica también por actualizaciones de salarios y antigüedades.

Por lo tanto, el presupuesto del Defensor del Pueblo ha experimentado una subida algo superior al 27% desde las cuentas para 2022.

Sin embargo, pese a la subida y el contexto general de inflación, el presupuesto para el Defensor del Pueblo está lejos del que se registró en 2007, cuando el organismo dispuso de 1.350.000 €.

El 70%, para personal

Del presupuesto, el 70% se dedica a gasto de personal. Ahora mismo, en la plantilla del Defensor del Pueblo hay cuatro asesores técnicos, un jefe de gabinete y un responsable de gabinete, todos ellos de libre designación. Aparte, hay un técnico de grado medio en gestión administrativa, y dos administrativos. Estos tres últimos puestos son funcionarios.

La segunda gran partida es, casi por un 22%, gastos en bienes corrientes y servicios. Transferencias corrientes se lleva el 3,58% e inversiones reales, el 4,47%.