El ocio nocturno volverá a partir de la fase 3, pero no lo hará tal y como se conocía hasta ahora. Discotecas y pubs deberán amoldarse a la nueva realidad tras la pandemia de coronavirus.

Así, entre los cambios mas destacables se encuentran la obligación de tener mascarilla en las discotecas, mamparas de separación o incluso tomas de temperatura antes de entrar a los locales.

La Federación Española de Empresarios de Ocio Nocturno junto al Instituto de Calidad Turística Española ha elaborado una guía con las indicaciones que deberán cumplir los 16.800 clubs de todo el Estado para prevenir contagios por Covid-19.

Entre los requisitos que deberán cumplir:

Taquillas con pantalla protectora

Las taquillas de las discotecas deberán disponer de una pantalla protectora para mantener la distancia con el público. En caso de que no sea posible implementar esta medida, los trabajadores deberán llevar mascarilla o un equipo de protección.

Se deberá fomentar el cobro a través de tarjeta u otros medios electrónicos que eviten la utilización de dinero en efectivo.

Guardarropa

El personal utilizará la protección individual resultado de la evaluación de riesgo. Se protegerá cada prenda y accesorio con fundas desechables. Por otro lado, "el área de guardarropía dispondrá de un punto de dispensador de gel hidroalcohólico".

Barra protegida

Al igual que ocurre en la taquillas, la petición de las consumiciones en barra se hará instalando elementos de protección que garanticen la distancia interpersonal. El personal utilizará elementos de autoprotección.

Por otro lado, los vasos y demás elementos para el servicio de bebida serán desechables o en caso contrario, se deberá asegurar su desinfección a >80º

Pistas de baile perimetradas

El uso de mascarillas será obligatorio en todo el establecimiento "cuando no se pueda asegurar la distancia interpersonal" , también en las pistas de baile. Además, las pistas estarán perimetradas. Será la propia sala la que determinará la capacidad de público de la pista de baile y el personal de admisión deberá supervisar que se cumplen las normas.

"En la medida de lo posible, se señalizará en el suelo la cuadrícula indicativa para poder respetar la distancia de seguridad. En el caso de que no pueda garantizarse la distancia interpersonal, el público utilizará mascarillas en la zona de la pista de baile".

Desinfección de instalaciones

A lo largo de la sesión de funcionamiento del local, se dispondrá de personal dedicado exclusivamente a la limpieza y desinfección de las instalaciones.

Se incrementará la frecuencia de limpieza, especialmente en las zonas de mayor contacto por donde pueda transitar un mayor número de personas y en las superficies de contacto frecuente como barandillas, pasamanos, pomos de puertas, mesas, barras, aseos, ascensores, etcétera.

Cartelería informativa y material de protección

El local dispondrá de la cartelería informativa explicativa de las condiciones de acceso al establecimiento, así como el cumplimiento obligatorio de medidas higiénico-sanitarias establecidas que, en caso de no cumplimiento, implicarán la expulsión del local.

Además, las discotecas deberán disponer de dispensadores de geles hidroalcohólicos, mascarillas, guantes o equipos de protección necesarios para el personal, así como termómetros sin contacto y paneles aislantes.

También se deberá priprizar las basuras con pedales, y se deberán garantizar la correspondiente renovación de los flujos de aire alcanzando los 28m3 por segundo.

Control de aforo en baños

Respecto a los cuartos de baño será imprescindible el lavado de manos al entrar y salir y las salas deberán contar con personal responsable del control de la capacidad de los mismos y su correcto funcionamiento.

Fomento del uso de reservados

Para facilitar el funcionamiento de los locales en la "nueva normalidad" se deberá fomentar la utilización de reservados y palcos para evitar aglomeraciones.

Control de acceso y aforo reducido

Se recomienda activar la utilización de terrazas en los locales de ocio para facilitar la progresiva recuperación y ayudar al control de flujos de público en el interior de los locales.

Para controlarlo, se adaptará el funcionamiento de colas y se utilizarán elementos de señalización para asegurar que se cumplen los dos metros de distancia de seguridad entre personas.

Cada local deberá establecer la ocupación máxima del establecimiento para que se pueda respetar la distancia interpersonal, así como métodos para el control del aforo.