MONTAÑA de Riaño es un destino ajeno al turismo de masas, lo que le ha permitido conservar intactos un gran número de atractivos turísticos. Montaña, gastronomía, espacios protegidos, patrimonio cultural y natural, paisajes alucinantes, un legado histórico extenso y excepcional y todo tipo de rutas, eso es lo que ofrece este impresionante territorio.
En el parque regional Montaña de Riaño y Mampodre descubrirás desfiladeros y riscos que te evocarán destinos del norte de Europa. El embalse y sus fiordos se han constituido en uno de los símbolos del emergente Riaño que evocan imágenes de una época en donde la gente vivía de la agricultura en los extensos valles hoy anegados y rodeados de un entorno increíblemente empinado y rocoso.
En un territorio tan montañoso, estos fiordos no tienen su origen en valles glaciares, profundos e invadidos por el agua del mar, sino que son el resultado de una invasión de agua dulce, consecuencia de la construcción del embalse y, por tanto, fruto de la inundación.
Además, custodiado por bosques de encinas y robles, testigos del paso de peregrinos durante siglos, se erige uno de los conjuntos monumentales más importantes de León. Entre los muros de sus monasterios, iglesias y ruinas, rezuma la historia de una comarca que fue señorial e hidalga. Sus bosques de ribera crecen a la vera del principal afluente del Duero: el río Esla, truchero y cristalino.
Además de ofrecer rutas en moto, te anima a descubrir la parte leonesa de Picos de Europa, que está plagada de rutas y senderos con increíbles vistas y panorámicas, con una gastronomía y unos miradores fascinantes. El invierno es la época para gozar de los deportes relacionados con la nieve, de los rayos de sol que se refractan en los blancos paisajes y de atardeceres al calor del fuego de una chimenea.
La Montaña de Riaño es un destino turístico donde se puede observar a los denominados siete grandes mamíferos en libertad, además de otras especies sorprendentes. Su oferta incluye también museos y espacios de temáticas diversas, como La Casa del Parque de Valdeburón, el Ecomuseo de la Lana Merina Trashumante, los Telares del Toño o los Museos de la Fauna Salvaje, la Siderurgia y Minería de Castilla y León o el del Ferroviario.
