El desmontaje del vallado de los encierros de San Fermín es una clara señal de que la fiesta se acaba. Los toros de Miura han protagonizado este lunes el octavo y último encierro de los Sanfermines. Ahora, toca retirar el vallado para que la ciudad vaya recuperando poco a poco la normalidad.

2.700 tablones

El proceso se ha iniciado pocos minutos después de terminar el encierro. Se trata de una labor en la que se retiran un total de 900 postes, 2.700 tablones y 2.500 cuñas instalados entre los Corrales del Gas y la plaza de toros. Hay, además, unas 80 puertas de diversos tamaños que sirven tanto de evacuación del vallado como de cierre del recorrido.

Toca guardarlos hasta el año que viene. El desmontaje del vallado es un proceso que marca el final de las fiestas de San Fermín y da paso a la normalización de la vida en Pamplona.