El 15 de julio es día de obligado balance sanferminero. Las fiestas dan para análisis profundos y conversaciones variadas. Una de ellas es la referente a la vasija utilizada.
En líneas generales la hostelería se ha esforzado para dar un servicio más que correcto con vidrio en las horas centrales. Sin embargo, no es posible hacerlo así en la tarde noche, que es cuando afloran los vasos reutilizables. Desde 2017, nos han venido explicando que estos vasos se adquieren en cualquier establecimiento pagando un euro en concepto de fianza y puede ser sustituido en otro local, donde recogen el usado y facilitan uno limpio.
Pero la realidad es bien distinta. Cuando los bares están muy concurridos, lo habitual es que te arrojen otro caldo en el mismo vaso en unas condiciones higiénicas manifiestamente mejorables. Con lo cual, si se alarga la tarde, uno pierde la cuenta de los vasos que va pagando sin que recupere nunca el euro que anticipa. Y si partimos de la base de que su coste en origen ronda los 50 céntímos, algunos han tenido que hacer un negocio más que redondo con los dichosos vasos reutilizables.