Durante todo este tiempo, más de 20 stands dispersos por el recinto mostrarán las ciencias ocultas que se esconden detrás de cada una de las disciplinas que se escapan a la racionalidad humana. Tanto creyentes como escépticos podrán internarse un poco más en este misterioso mundo, y averiguar cuáles son las claves de cada uno de los métodos que ayudan día a día a miles de personas a superar su presente, y enfrentarse al futuro. Además, los curiosos que se acerquen al salón de esoterismo podrán participar en los encuentros y charlas previstas, la mayoría gratuitas, sobre la energía de los minerales, astrología, tarot, formas de atraer la buena suerte, clarividencia o cursos que tratarán de enseñar ejercicios prácticos de respiración y relajación.

videncia

El arte de leer el futuro

"Es muy importante, a la hora de conectar con la gente, que sepan que uno está preparado, que no lleva en esto dos días. Esto no es una broma, es muy serio", explica Carmen Navarrete, vidente, druida y estudiosa de Alta Magia.

Navarrete, que ahora tiene "más de 60 años y menos de 70", fue consciente de que tenía un don especial a los 14 años cuando acudió con una amiga a una sesión de espiritismo y, la señora que les atendía, las terminó echando por "brujas". "La mesa comenzó a moverse y la mujer que nos iba a realizar la sesión me acusó a mí de moverla. Yo sabía que yo no era y, no sé cómo, también sabía que el novio de mi amiga, cuyo paradero tratábamos de descubrir, estaba en Argentina, a punto de casarse con otra. Cuando al cabo de un mes llegó una carta de él confirmando todo lo que yo había dicho, supe que la energía que había movido la mesa, también era cosa mía", explica, al tiempo que aclara que "no hace milagros". "Mi campo son los consejos, limpio a la gente de las malas energías", apunta.

tarot

El arte de leer el presente

Juanes, además de ser economista, tiene muchos hobbies, pero uno de sus favoritos es la lectura del tarot y la interpretación de las cartas. Respecto a esta disciplina, Juanes aclara "que no se trata de leer el futuro, sino de la adivinación de los presentes ocultos, realidades que conviene ver y que nos lleva a poder modificar nuestros comportamientos". "Si alguien está a punto de pegarte una puñalada en la espalda, las cartas lo ven y te avisan", explica.

Su especialidad es el tarot de marsella. "Hay 22 arcanos mayores, que son las cartas que nos indican los momentos fuertes de nuestra vida, y luego hay otras 56 cartas que llamamos arcanos menores, que identifican nuestro paso concreto", explica. "Cada carta tiene un significado, pero la interacción entre unas y otras nos da otro tipo de informaciones", precisa, al tiempo que reconoce que "gracias a Dios, solo le ha ocurrido pocas veces el no poder leer las cartas a alguien". "No soy adivino, y una vez llegó una chica a la cual no podía leer las cartas. No sabía por qué hasta que, desgraciadamente, falleció a los tres días", recuerda Juanes. "Siempre he sido un hombre de números, pero al final terminé por reconocer que las cartas aportaban información", dice el economista, quien reconoce que "ha sido multimillonario dos veces y se ha arruinado tres". "Con los años te das cuenta de que lo importante, no es el dinero. Por eso no utilizo esto en mi propio beneficio", argumenta.

manos

Líneas de la vida, mente y amor

María Luisa Martín, exsecretaria de dirección, viene desde Madrid, y asegura que "siempre ha sido una persona muy intuitiva". "Lo que más me gusta es que ayudo a los demás a aprender a ser la mejor versión de sí mismo. La mano es como un árbol. El tronco es la muñeca, y según va saliendo, las rayas que asoman al exterior a través de los dedos representan nuestras virtudes. Pero todas las líneas horizontales que se cruzan en este camino son los obstáculos que nos pone la vida, que suelen ser cosas educacionales", explica Martín. "Aunque las más importantes son las tres líneas principales: la de la vida (la más próxima al pulgar), la de la mente (la del medio), y la del corazón (la que está más cerca de los dedos)", detalla.