El roscón, el cuarto rey

PAMPLONA. La tradición marca estos últimos momentos de fiesta y la mayoría de navarros y navarras opta por el día de Reyes para celebrar un encuentro familiar y abrir los regalos que los tres magos han dejado en sus casas, aunque algunos afortunados ya cuentan con los presentes bajo el árbol cuando vuelven de la visita real o tienen el honor de recibir en sus hogares a Melchor, Gaspar y Baltasar, quienes entregan personalmente los juguetes a los más pequeños. SS.MM. los Reyes Magos de Oriente no se olvidan de pasar por ninguna localidad.

EL OTRO PROTAGONISTA Melchor, Gaspar y Baltasar no son los únicos protagonistas de estas fechas. Falta un cuarto rey: el de los postres. Ni siquiera el turrón puede con el rosco de reyes. El más exitoso es el rosco mediano de nata, pero también se pueden encontrar roscos de todos los tamaños de crema, trufa, hojaldre o sin relleno. Desde Taberna, Virginia San Miguel, responsable de marketing, señaló que "la venta de roscos es una tradición muy arraigada, por lo que la gente está deseosa de que llegue". Este postre sólo se vende en Reyes y San Blas, pero estas Navidades creen que las ventas se alargarán durante el fin de semana. En Zabaleta, una pastelería que dispone de comercios en Barañáin y Noáin, los roscos se elaboran de forma artesanal al gusto del consumidor. "Tenemos tres tamaños y ofrecemos roscos de nata, crema, trufa, mixta... las combinaciones y la cantidad de relleno que se quiera. También metemos las sorpresas que nos piden, por lo que en vez de la tradicional figurita puede aparecer un billete de 10 euros" afirmó Miguel Zabaleta, jefe de la pastelería.

LA TRADICIÓN El premio. Generalmente, una figura pequeña escondida dentro del rosco decidirá quién es el afortunado que se coronará como rey y obtendrá un año de buena suerte. La corona. Una corona de rey adorna el roscón, y se la tendrá que poner en la cabeza quien encuentre La figurita. El haba. Un haba dura y seca también se esconde dentro. Quien la encuentre estará obligado a pagar el postre el año que viene y obtendrá un año de mala fortuna. Como dice el dicho: "Si el haba es lo encontrado el Roscón pagarás; más si ello es la figura, coronado y Rey serás..." La historia. Su origen se remonta a la época romana, cuando se celebraba, a mediados de diciembre, la llegada de los días más largos tras el solsticio de invierno. Los campesinos tenían tiempo para descansar y se les premiaba con tortas redondas hechas con higos, dátiles y miel. Estas tortas también se repartían entre los pobres, y entre ellas se escondía un haba seca que representaba la prosperidad. Quien la encontraba, si era esclavo, quedaba libre ese día además de pasar a ser tratado como un rey, un privilegio que en la actualidad le corresponde a quien da con la figurita.

NUEVOS SABORES Y TAMAÑOS Los pasteleros prevén mantener el número de pedidos de roscones de Reyes, en un momento en el que la crisis impulsa a comprar unidades de menor peso, aumentan las propuestas gastronómicas para responder a todos los gustos y se amplía la temporada de su consumo.

En Madrid, el gremio de pasteleros prevé que se igualen los más de un millón de pedidos de 2012, aunque "se venderán bastantes kilos menos", ha afirmado a Efeagro su presidente, Salvador Santos, mientras en Cataluña esperan llegar a unas 850.000 unidades, sin variaciones significativas con respecto al año pasado.

Aunque el más demandado es el roscón tradicional, redondo, hueco en el centro y sin relleno, este dulce típico de Reyes ofrece ya un amplio abanico de variedades y precios, para todos los gustos y bolsillos.

Y así, a pesar de la crisis, los pasteleros buscan cada año darle la vuelta al roscón tradicional, incluso literalmente: en Madrid, la pastelería Nunos propone este año un "roscón invertido", con el relleno fuera y flambeado al ron en el último momento.

Los reposteros de Nunos fabricarán 12.500 unidades, con propuestas exquisitas como el relleno de chocolate con limón y crujiente de arroz, el de crema de "toffee" a la flor de sal con naranjas al chocolate, el crujiente de "cookies" y muselina de nata o el de té verde japonés con melocotón.

También destaca por su alto nivel de producción la pastelería Mallorca, donde esperan producir las mismas unidades que el año pasado, unas 40.000, aunque detectan que los españoles "consumen cada vez roscones más pequeños", según ha reconocido a Efeagro su jefe de producción, Miguel Moreno.

Sin embargo, Moreno ha remarcado que "los esfuerzos del sector por alargar la temporada" están teniendo sus frutos y las compras del roscón se adelantan cada año, de forma que "antes se compraba un roscón grande, pero ahora se compran más y más pequeños".

También hay ofertas más refinadas, como las de "Mamá Framboise", una pastelería de influencia francesa situada en Madrid y cuyo creador, Alejandro Montes, funde las tradiciones galas con las españolas, como demuestra su roscón de chocolate decorado con "macarrons", un dulce ya popular en Francia en el Renacimiento.

Eso sí, la apuesta por los dulces "gourmet" tiene un coste elevado, con un precio por kilo que puede ascender a los 59 euros, como es el caso del roscón de Oriol Balaguer, la tienda del revolucionario pastelero catalán en Barcelona.

En el otro lado de la balanza están los roscones industriales, cuyo precio medio oscila entre los 8 y 10 euros el kilo y de los que se producirán en España 10 millones de unidades para repartir en supermercados y otros puntos de venta.

Según un estudio recientemente publicado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), a excepción de una marca, la calidad de los roscones de pastelería destaca sobre la de los industriales, que en muchos casos recurren al congelado y al uso de grasas y aceites vegetales de menor calidad y perjudiciales para la salud cardiovascular.

Industriales, artesanales, clásicos o dados la vuelta la oferta es amplia, pero, en cualquier caso, la tradición manda: a ninguno le faltará la corona ni la sorpresa, y en algunos casos el haba, que asigna a quien la encuentre la tarea de comprarlo al año siguiente.