Detenidos la pareja del joven hallado en el Ebro y tres personas más por su muerte

PAMPLONA/TUDELA - La Guardia Civil detuvo ayer a cuatro personas en relación con el asesinato del joven ecuatoriano Wilson Alejandro Yanza Heredia, de 33 años de edad, cuyo cadáver fue hallado el pasado jueves en el río Ebro a su paso por Castejón. Entre los arrestados se encuentra la pareja sentimental del fallecido, la brasileña Irene de Fátima Sabino, de 36 años, con la que el fallecido había tenido un hijo hace apenas un mes, así como otras tres personas, dos de ellas familiares de la arrestada, también de origen brasileño (un hombre y una mujer), y una de origen español.

Las cuatro personas detenidas pasarán en las próximas horas, probablemente este viernes, a disposición del juez de guardia de Tudela.

Las detenciones fueron practicadas ayer por la mañana como resultado de la investigación llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Guardia Civil de Navarra, bajo la dirección del Juzgado de Instrucción número 1 de Tudela. Aunque se mantiene decretado el secreto de sumario, las pesquisas sobre el fallecimiento del joven ecuatoriano implican directamente a su pareja sentimental, con la que había mantenido en fechas recientes una fuerte discusión en el domicilio que compartían en la capital ribera desde principios de año, según apuntaron allegados al fallecido.

La mujer fue arrestada ayer precisamente en la vivienda situada en el número 22 de la calle Padre Moret de Tudela, una modesta casa de una planta en torno a la que la Guardia Civil realizó un importante despliegue. Agentes del Laboratorio de Criminalística llevaron a cabo el registro del domicilio en busca de pruebas sobre los hechos que condujeron al homicidio o asesinato de Wilson Alejandro Yanza, que trabajaba de panadero en la capital ribera y que durante años regentó un comercio de alimentación en el barrio de San Jorge de Pamplona.

El cuerpo del joven fue localizado el jueves pasadas las 12.30 horas en el río Ebro, en las proximidades de la central térmica de Castejón, muy cerca de la orilla. No presentaba signos de violencia, pero la presencia de marcas de arrastre en el suelo hicieron sospechar a los agentes de la Guardia Civil que se trataba de una muerte violenta, un extremo que confirmó la autopsia que se le efectuó al día siguiente y que demostró que había muerto por asfixia y posteriormente había sido lanzado al agua.

Para los investigadores el hecho de que no presentara golpes ni signos de violencia reforzó la hipótesis de que los autores habían planificado el modo de causarle la muerte al joven, intentando simular su suicidio y arrojándolo al río Ebro con el objetivo de deshacerse del cadáver y retrasar su aparición. Por ello se centraron las pesquisas en el entorno del fallecido, cuya desaparición no fue denunciada hasta el día siguiente por su pareja y ahora detenida.

Las lagunas en el testimonio prestado por la mujer, que afirmó que el joven había salido el miércoles por la tarde a hacer la compra y no había regresado, centraron la línea de investigación de la Guardia Civil, que en el día de ayer detuvo a un total de cuatro personas por su supuesta vinculación con el crimen. Además de la pareja del fallecido, fueron arrestados un varón y una mujer de origen brasileño familiares de la anterior, y otros varón de nacionalidad española, cuyas identidades no trascendieron.

Además de registrar el domicilio en el que residían en Tudela, la Guardia Civil intervino el turismo de la pareja aparcado en las proximidades, un Skoda Octavia blanco que fue trasladado a dependencias policiales con el fin de someterlo a una inspección técnico-policial que permita esclarecer si pudo ser utilizado para trasladar el cuerpo del fallecido hasta el río Ebro. No obstante, los investigadores creen que el cadáver fue transportado en otro vehículo.

Mientras que los cuatro detenidos fueron conducidos a las dependencias de la Guardia Civil en Pamplona, un familiar se hizo cargo del bebé, llamado Alejandro como su padre. Desde el Instituto Armado se comunicaron los hechos a los servicios sociales del Ayuntamiento de Tudela.

Además de ultimar las diligencias propias de la investigación, los instructores pretenden tomar declaración a los detenidos en las próximas horas, con el objetivo de que mañana viernes puedan pasar a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Tudela, aunque el arresto podría prorrogarse hasta el sábado.

Un arresto, fuera de navarra

Otras dos detenciones en Pamplona y una en Tudela. La investigación del crimen de Wilson Alejandro Yanza Heredia, que fue iniciada por la Policía Foral, ha sido culminada por la Guardia Civil en menos de una semana desde que se produjo el hallazgo del cadáver en el río Ebro con las detenciones de los cuatro supuestos implicados, uno de los cuales fue arrestado fuera de Navarra por encontrarse circunstancialmente lejos de la Comunidad Foral. Los otros dos fueron detenidos en Pamplona, mientras que en Tudela fue arrestada la compañera sentimental del fallecido.