Bilbao - Eneko F. I, de 33 años, vecino de Sestao, mató ayer a puñaladas a su mujer Noelia Noemí B.G., de 31 años, en la localidad vizcaína y luego se suicidó arrojándose al vacío desde el séptimo piso de su vivienda del número 7 de la Plaza de los Concejos de Sestao, según informó el departamento de Seguridad del Gobierno Vasco.

Cuando los agentes de la Ertzaintza pudieron derribar la puerta de acceso a la casa, alrededor de las 11.50 horas, se encontraron a Noelia Noemí B. G. muerta en el sofá con un profundo corte en la yugular y varias puñaladas en el cuerpo.

La tragedia llegó a esta vivienda con el agravante de que la madre del joven oyó la discusión entre su hijo y su mujer, ya que esta le había llamado por teléfono para advertirla de que le veía muy alterado.

Eneko F. I. estaba muy alborotado ayer por la mañana. De hecho, según fuentes sin confirmar, el joven podría padecer algún tipo de enfermedad psiquiátrica. Lo que está claro es que ayer por la mañana sufrió un brote psicótico, porque llamó varias veces a la Ertzaintza solicitando protección, afirmando ser un traficante perseguido por unas personas que querían agredirle.

Noelia Noemí se alarmó por la actitud de Eneko y llamó a su suegra por teléfono. Precisamente, mientras ambas mujeres conversaban, se inició una discusión entre el matrimonio que fue cada vez más violento, hasta el punto en que de un manotazo el teléfono móvil cayó al suelo.

Todo indica que Eneko cogió un cuchillo de cocina, “de grandes dimensiones”, según apuntaron fuentes cercanas a la investigación, y se abalanzó sobre su mujer quien consiguió darle un corte profundo en el cuello, a la altura de la yugular, además de varias puñaladas en el cuerpo.

Agentes de la Ertzaintza llegaron al domicilio momentos antes de que el joven se lanzara al vacío e incluso llegaron a hablar con él, mientras intentaban que abriera la puerta ante el temor de que pudiera haberle hecho daño a su mujer.

Eneko repitió muy alterado que alguien le estaba persiguiendo y gritó que le querían matar. Acto seguido se lanzó por una de las ventanas de la vivienda, en una caída que fue mortal.

Cuando los ertzainas entraron en la vivienda encontraron a la joven en el sofá del salón con cocina americana y el cuchillo ensangrentado encima de la mesa.

Fuentes del Ayuntamiento y de Seguridad del Gobierno vasco confirmaron que a ninguno de sus departamentos les constaba diligencia alguna de esta pareja por violencia de género previa a este suceso. En el registro de la vivienda, los agentes encontraron una habitación con varias plantas de marihuana, así como diversos utensilios, como por ejemplo focos, para su mantenimiento.

A primera hora de la tarde de ayer, los dos cadáveres fueron trasladados por los servicios funerarios. Tras lo ocurrido, el Ayuntamiento de Sestao reunió a su Junta de Portavoces, que emitió un comunicado de condena y ha convocado hoy una concentración de 15 minutos de silencio y repulsa a la violencia contra las mujeres mañana en la Plaza del Kasko del municipio. En la declaración, los grupos municipales condenan el asesinato de su vecina y transmiten su solidaridad y apoyo a sus allegados. Según indican, la violencia contra las mujeres es “un atentado contra su integridad física y moral y un ataque a su dignidad y, consecuentemente, una grave e intolerable violación de los derechos humanos”.

Los grupos políticos locales señalaron que estas agresiones se producen en el marco de “una sociedad donde no existe la igualdad entre hombres y mujeres”, por lo que llaman a los ciudadanos a reflexionar y asumir “la importancia de los valores y actitudes de respeto e igualdad entre las personas”.

38 FALLECIDAS EN 2017 La joven de Sestao asesinada ayer es la primera asesinada este año por violencia machista en la CAV y su muerte coincide con la aprobación, ayer, en el Congreso del pacto de Estado de violencia de género que ya no se considerará violencia de género solo la ejercida por parejas o exparejas, sino todos los tipos de violencia contra las mujeres. Es decir, además de la física, psicológica y sexual, incluye la violación, la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado, el acoso sexual y el acoso por razones de género, el aborto y la esterilización forzada.

Con este asesinato, ya son 38 las mujeres víctimas de violencia de género, que ha costado la vida también a seis menores y además, se trata del segundo caso de esta semana tras la muerte de una joven de 20 años en Cartagena.

El Gobierno mantiene en investigación para determinar si son casos de violencia machista las muertes de otras tres mujeres en Redondela (Pontevedra), La Llagosta (Barcelona) y Mogán (Las Palmas). - Laura Fernández