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Navarra, una más en la trama del robo de bebés

un libro editado por la upna analiza la deuda pendiente con las víctimas desde una visión multidisciplinar de la justicia Un reportaje de Lola Cabasés Hita Fotografía Javier Bergasa

Navarra, una más en la trama del robo de bebés

la modificación de la Ley de memoria histórica de Navarra del 3 de julio de 2016 para incluir el entorno de los casos de bebés robados como víctimas de un delito que los expertos reconocen de lesa humanidad marca un punto de inflexión en una problemática cuyos protagonistas están teniendo poco éxito en el ámbito judicial y muchas dificultades en el amplio campo de la investigación. Si bien Navarra destaca ahora por ofrecer un banco de ADN, justicia gratuita y, en suma, el reconocimiento de las víctimas con todo lo que ello conlleva a través de una ley pionera en el Estado, la situación en cuanto al delito “es idéntica a la del conjunto del Estado. Fue una trama que operó a nivel estatal, bebés nacidos en Navarra pudieron acabar en Cataluña. No hemos encontrado nada que nos distinga a Navarra”, aseguró ayer el profesor de la UPNA Roldán Jimeno Aranguren en la presentación, junto a la también docente Soledad Barber Burusco, del libro “Niños desaparecidos, mujeres silenciadas”, un libro que analiza desde una visión multidisciplinar de la Justicia la deuda pendiente con las víctimas.

Ambos profesores del departamento de Derecho Público de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) Soledad Barber Burusco y Roldán Jimeno Aranguren han editado el libro que recoge las actas del congreso “Niños desaparecidos, mujeres silenciadas”, recientemente celebrado en la UPNA organizado a través de la Cátedra Unesco. Ayer, ambos explicaron los detalles de la publicación.

En el libro se analiza el complejo tema de la sustracción de menores a través de las ópticas del Derecho Internacional Público, el Derecho Internacional Privado, el Derecho Constitucional, el Derecho Penal y la Historia del Derecho. Buena parte de los estudios se centran en los casos de las desapariciones forzadas de niños y niñas en la dictadura franquista, observando las dificultades a que se enfrentan los denunciantes para que avancen las investigaciones en los procesos penales. “El paso del tiempo, la prescripción o ciertas resistencias y prejuicios demostrados por los operadores jurídicos en España contrasta con la consideración de que las desapariciones forzadas de niños sean consideradas un crimen contra la humanidad por el Derecho internacional”, dicen los editores.

frente a 3.000 denuncias, 2 juicios Estas dificultades se hacen patentes cuando se comprueba que se han tramitado en estos años casi 3.000 denuncias en el Estado y solo dos casos llegarán a juicio oral, en palabras de Soledad Barber. En el caso de Navarra, las siete denuncias presentadas ante la Justicia han sido archivadas -recordó Roldán Jimeno- mientras hasta 300 personas se han interesado por su caso ante la asociación SOS Bebés Robados, entidad que agrupa hoy a más 60 familias que sospechan de robos y adopciones irregulares. Precisamente su presidenta, Cristobalina Moral, también participó en la jornada de la UPNA.

El libro presentado ayer, cuyos autores son fundamentalmente docentes e investigadores de la UPNA, recoge también una perspectiva comparada con los casos internacionales más relevantes: el de la sustracción de niños y niñas y adopciones irregulares de la República de Irlanda y el conocido caso de los menores robados de Argentina, a través del testimonio de las Abuelas de la Plaza de Mayo, pioneras en este movimiento que en el Estado español -apuntó Barber- se inicia hacia 2003 y toma fuerza gracias a investigaciones periodísticas. “Estas víctimas comenzaron a interponer denuncias de forma separada de 2006 a 2008 y, al encontrarse con obstáculos en la investigación penal, en 2011 las asociaciones acuden de forma conjunta a la Fiscalía General del Estado”.

Se acomete también en el libro un acercamiento a la condición social de las mujeres durante el franquismo, tratando tanto la regulación del trabajo femenino como la realidad de las mujeres presas. Realidad discriminada y de difícil valoración numérica, en comparación con los presos varones, ya que, como señaló Barber, no se registraba su condición de presas políticas. “No tenemos datos -señaló ayer Soledad Barber- de cuantas eran y de lo que pasó con los niños a las que se los arrebataron. Como consecuencia de un decreto de 1940, todavía vigente, las madres encarceladas pueden estar con sus bebés hasta que éstos cumplen 3 años, después pasaban a manos de sus familias, a las de adoptantes y, ahora ya, a instituciones públicas”. La falta de control facilitó la impunidad y la desaparición de menores.

derecho a saber es prioritario Y es que, como se ha indicado, además de la sustracción de menores, el monográfico aborda el tema de las mujeres presas durante el franquismo y la regulación del trabajo femenino. Así, Paz Francés Lecumberri aporta su visión en “Mujeres presas en el franquismo: el impacto de la dictadura en la incorporación de la perspectiva de género en las prisiones españolas” y Elisa Sierra Hernaiz hace lo propio en “La regulación del trabajo femenino: de la normativa falsamente protectora a la igualdad de derechos en el mercado laboral”.

Para estos investigadores, destacaron ayer Roldán Jimeno y Soledad Barber, “la desaparición forzosa de niños es un tema con el que España tiene una deuda pendiente muy importante respecto a sus víctimas”. Algunas personas adoptadas de forma irregular o que fueron “compradas” han conocido su origen y buscan a sus madres y padres, mientras que otras desconocen su identidad, dijeron no sin destacar que “el robo de bebés es un delito de lesa humanidad”. Reconocieron que hay un debate sobre la mesa sobre el conflicto de derechos que el tema suscita. El derecho a conocer su origen y el derecho de la familia acogedora. “En Argentina se apeló al derecho adquirido como si la persona fuera un bien inmueble”, apunta Barber quien tiene claro que “cualquier ser humano tiene derecho a conocer su identidad, su historia y este derecho está por encima de cualquier otros. Además, en estos casos, se parte de un hecho delictivo, de un hecho ilícito por lo que la prioridad la tiene el derecho a saber, no hay duda”.

El libro. El libro Niños desaparecidos, mujeres silenciadas está disponible en formato papel y electrónico y está editado por Tirant lo Blanch.

Los autores. Los autores y sus artículos son: Alicia Chicharro Lázaro (Las desapariciones forzadas de niños a la luz de la Convención de Naciones Unidas de 2006), Unai Belintxon Martín (Derecho internacional privado y niños robados), Cristina Zoco Zabala (Niños robados en España e integridad moral), Leticia Jericó Ojer (La respuesta jurídicopenal a la sustracción de menores: los niños robados durante el franquismo) y Javier Chinchón Álvarez, con La sustracción de menores en el Derecho Internacional. Paz Francés y Elisa Sierra aportan mujeres presas y el trabajo femenino.

Las jornadas. El libro recoge las actas del congreso Niños desaparecidos, mujeres silenciadas celebradas en la UPNA organizadas por la Cátedra Unesco.