La Guardia Civil de Navarra puso en funcionamiento el pasado día 3 de abril la unidad OMAP –Oficinas Móviles de Atención al Peregrino–, unas patrullas móviles para dar respuesta de forma “más ágil y eficiente” a cualquier necesidad de seguridad o información de los peregrinos y albergues en el Camino de Santiago a su paso por la Comunidad Foral.

Así, el pasado sábado, día 8, la patrulla auxilió a un varón de nacionalidad colombiana que caminaba descalzo por la carretera NA-135 a la altura de la localidad de Viscarret. Se había pasado la incorporación al Camino de Santiago unos 2,5 km aproximadamente, por lo que al conocer que su intención era hacer el Camino los agentes le informaron de que esa no era la ruta y lo llevaron al punto correcto para que continuase su marcha.

Asimismo, en estos días, la unidad de la Guardia Civil ha encontrario a varios peregrinos desorientados. En concreto, el pasado jueves día 6 se trasladó a dos caminantes que se encontraban desorientados y desviados del Camino, en la N-135 a 3 kilómetros de Burguete, y con peligro de ser atropellados, detalló la Guardia Civil en una nota.

También, los agentes están realizando traslados a centros médicos y albergues, principalmente en la zona de Roncesvalles a Zubiri, primeros kilómetros del Camino donde “más sufren los peregrinos hasta que se adaptan al terreno y donde más queda patente la falta de preparación física”.

Igualmente, se han localizado varias señales del Camino desviando a los peregrinos a otro lugar en la localidad de Espinal-Erro. Estas modificaciones, indicó el Instituto Armado, hubiesen podido llevar a los peregrinos a equivocarse, llegando hasta el camino de Sorogain, de manera que se perderían completamente del Camino de Santiago: