Un total de 23 personas en la Comunidad Foral han recibido la prestación de ayuda para morir desde la entrada en vigor de la Ley Orgánica de Regulación de la Eutanasia, el 25 de junio de 2021. Así, en ese primer año –realmente fueron seis meses– pudieron ejercer este derecho dos personas; en todo 2022 fueron 13; y en lo que llevamos de 2023 –hasta el pasado 9 de octubre– son ya 8 las que han completado todo el proceso, según los datos del servicio de Ciudadanía Sanitaria, Aseguramiento y Garantías del departamento de Salud del Gobierno de Navarra.

La gran mayoría de los casos, explican, se realizan en el domicilio familiar del solicitante y el tiempo medio que transcurre desde la primera solicitud hasta la prestación es de 44 días de media, cuando el plazo máximo marcado para este procedimiento es de 60 días.

Informar mejor de los requisitos

Preguntado por qué valoración hace el departamento de Salud del funcionamiento de esta normativa, una vez transcurridos más de dos años desde que comenzara a aplicarse, desde el servicio de Ciudadanía Sanitaria consideran que “hay que mejorar la información, tanto a la ciudadanía como a los profesionales, en el sentido de conocer los requisitos que implica la Ley Orgánica, ya que se debe entrar en los supuestos que marca la Ley”. 

También aboga por “seguir trabajando en la capacitación de los y las profesionales en la atención al final de la vida, para atender situaciones de forma integral, respetando los derechos a una muerte digna, a una atención integral, con cuidados paliativos, abordaje en equipo y atención sanitaria y social”.

No obstante, una vez finalizado el proceso, constatan que “en las prestaciones realizadas las familias se han mostrado agradecidas por poder cumplir con el deseo de la persona solicitante y por haber podido preparar el momento final, con una sensación de que la persona querida ha fallecido en paz y como ella quería”. 

Por otro lado, indican que a fecha del pasado mes de marzo, había 303 profesionales registrados como objetores de conciencia frente a la eutanasia, entre Medicina, Enfermería y Psicología Clínica.