La decana del Colegio Navarro de Psicología, Rosa Ramos, ha sostenido este martes en la jornada Conversa de Salud Mental, organizada por Cadena Ser con el impulso de Fundación Caja Navarra, que “los primeros tratamientos para problemas comunes de Salud Mental deberían ser a través de profesionales que escuchan, que dotan de recursos a las personas para que puedan hacer frente a sus problemas y que, además, ese aprendizaje dura para siempre”. Sin embargo, ha criticado, “los psicofármacos son la respuesta más inmediata que se está dando en primer lugar para dar salida a todos los trastornos emocionales”. Por ello, ha reivindicado la terapia psicológica como primera opción de tratamiento, como así lo recomiendan las principales guías de práctica clínica basadas en la evidencia científica.
En su ponencia, ha explicado que “la prevalencia de los trastornos de Salud Mental se incrementa con la edad. Afectan más a hombres en la infancia y en la adolescencia y a mujeres, a partir de la juventud y madurez”. En 2021, según indicó, “los problemas más frecuentes fueron trastornos de ansiedad –con una prevalencia de 12,69%–, trastornos del sueño –7,88%– y trastornos depresivos –4,68%–”.
Respecto a la juventud, ha señalado un estudio realizado sobre todo a población universitaria que constata “un aumento de los síntomas depresivos, de los síntomas de ansiedad y de los pensamientos suicidas”. A juicio de esta especialista, “el problema más importante, por lo menos en la juventud, es la ideación” y ha indicado, al respecto, que “no es tan alto el número de suicidios que se ejecutan, pero debemos hacer un trabajo de prevención muy importante con el tema de la ideación o de los intentos frustrados”.
Faltan psicólogos
La decana ha denunciado que “hay una carencia de recursos humanos. La media estatal es de 5,14 profesionales de Psicología por cada 100.000 habitantes –situándose a la cola del Viejo Continente–, cuando el promedio europeo es de 20. En Navarra no estamos tan mal, con una media de 10 por 100.0000”, pero se encuentra muy lejos de países como Suecia (58) o Dinamarca (54).
“Nunca había tenido que atender a tantas mujeres mayores de 60 años por problemas de soledad”
Como ha explicado, “cuando una persona tiene problemas de Salud Mental o trastornos emocionales, la primera puerta de entrada al sistema sanitario es el médico de cabecera, que lo único que puede hacer es recetar psicofármacos”. Tras advertir sobre los efectos secundarios que producen su consumo, como es “la adicción que va creando”, ha instado a la administración a “aumentar los recursos humanos” para ayudar a los ciudadanos a mejorar sus capacidades psicológicas para afrontar los eventos traumáticos.
Finalmente, ha manifestado que “necesitamos incorporar psicólogos educativos en las escuelas”, porque “hay un nivel de autolesiones muy importante, también ideación suicida, violencia entre iguales. Si ese tipo de situaciones se manejaran adecuadamente desde el ámbito educativo, no tendríamos que recurrir a intervenciones especializadas”. Asimismo, ha planteado incorporar la figura del psicólogo en los servicios sociales para “fomentar programas de buenas relaciones sociales, de autonomía”.
