Es un un nuevo fenómeno que ha subido como la espuma. Mientras el consumo de tabaco se ha ido reduciendo en las últimas décadas, la aparición de los cigarrillos electrónicos ha abierto una nueva vía de consumo que preocupa cada vez más.

Según la encuesta ESTUDES 2023, en Navarra se detecta un aumento del consumo de cigarrillos electrónicos, pasando del 10,2% en 2018 al 14,3% en 2023, siendo este dato algo inferior a lo que reflejan los datos a nivel nacional en los que se pasa de un 14,9% en 2018, al 26,3% en 2023.

 El número de personas, tanto en población joven como adulta, que han probado o utilizan estos productos está aumentando, según los últimos datos a nivel internacional y también en nuestro país, siendo más significativo este aumento en personas jóvenes.

En Navarra, alrededor de la mitad (48,5%) de los estudiantes de 14 a 18 años reconoce haber consumido alguna vez en su vida cigarrillos electrónicos con o sin nicotina y el 45,1% haber consumido pipas de agua, más conocidas con el término cachimbas o sishas.

El 37,9% piensa que vapear es malo

Además, según ESTUDES 2023, existe entre las personas jóvenes una baja percepción del riesgo asociado al consumo de estos productos ya que solamente el 37,9% piensa que fumar cigarrillos electrónicos puede causar bastantes o muchos problemas, frente al 76,8% que piensa lo mismo de fumar entre 1 y 5 cigarrillos de tabaco convencional. A pesar de que la venta de tabaco a los menores de edad está prohibida, el 90,1% de adolescentes de Navarra percibe que puede adquirirlo sin ninguna dificultad.