En la víspera del Día Internacional del Euskara (Euskararen Eguna 2025), las y los representantes de los agentes sociales que integran Euskalgintzaren Kontseilua han hecho pública una declaración conjunta en la que expresan su preocupación por la situación “grave” del proceso de normalización lingüística. La secretaria general, Idurre Eskisabel Larrañaga, ha sido la encargada de exponer este martes en Bilbao tanto el diagnóstico como las propuestas para revertir la tendencia actual.
Eskisabel recordó que hace un año Kontseilua calificó la situación del euskara como una “emergencia lingüística”, diagnóstico que hoy —tras un 2025 marcado por nuevas sentencias contrarias a la oficialidad y por el estancamiento de las políticas públicas— consideran plenamente vigente. Un estudio de Siadeco para UEMA apunta, además, que para 2036 el euskara podría perder sus últimos territorios de mayor vitalidad si no se produce un cambio significativo en las políticas lingüísticas.
Un pacto sociopolítico y un “salto” en las políticas lingüísticas
Ante este escenario, Kontseilua ha redoblado su apuesta por impulsar un amplio consenso social y político. En septiembre presentó la Propuesta para un nuevo Pacto Sociopolítico, fruto del proceso Batuz Aldatu, a la que ya se han adherido más de 130 agentes de todo el territorio: desde clubes deportivos, hasta colegios profesionales, agentes culturales, entidades feministas o asociaciones de pensionistas. Entre las adhesiones más recientes destacan EHU, la Universidad de Deusto y la Fundación Labayru.
El documento plantea dos claves fundamentales: construir las bases de una sociedad en la que toda la ciudadanía pueda apropiarse del euskara, y crear espacios donde usarlo con normalidad. Según Kontseilua, estos pasos permitirían superar las ideologías excluyentes y avanzar hacia la igualdad lingüística, la justicia social y una convivencia más democrática.
Movilización ciudadana y primera cita: Bilbao Arena
Junto a la esfera institucional, Kontseilua subrayó la importancia del compromiso activo de la ciudadanía. La secretaria general hizo un llamamiento a reforzar la “euskaltzaletasuna” —el compromiso militante con el euskara— en los pueblos, barrios, centros de trabajo y estudio, y en cualquier ámbito de organización social.
Como primer gran gesto colectivo, la organización invita a llenar el Bilbao Arena el próximo 27 de diciembre. El evento, denominado Pizkundea, aspira a convertirse en la “primera chispa” de un nuevo ciclo de revitalización. Toda la información está disponible en el portal *pizkundea.eus*.
“Es el momento de sembrar esperanza”
Kontseilua reiteró también su disposición a seguir colaborando con instituciones y partidos políticos, a quienes reclama situar el euskara en primera línea de sus prioridades. Recordó que el movimiento social ha sido durante décadas un pilar esencial en ámbitos como la educación, la euskaldunización de adultos, la cultura o la investigación sociolingüística, y que su conocimiento acumulado y compromiso serán “imprescindibles” para garantizar el futuro.
La declaración concluye con un llamamiento a que el Día del Euskara de 2025 marque el inicio de un nuevo impulso colectivo: “Es tiempo de sembrar esperanza, pero no de esperar. El salto debe ser ahora”.