El italiano que mató a una persona e hirió a otras cinco, entre ellos el jugador español del Monza Pablo Marí, ayer en un centro comercial de Assago, (norte) asegura que sintió "envidia", al ver "a toda esa gente feliz" y así lo ha dicho al fiscal que lleva el caso y que ha decretado su internamiento de forma cautelar.

El individuo, identificado como Andrea Tombolini y que estaba siendo tratado por problemas mentales, ha sido acusado del asesinato del cajero boliviano del supermercado Carrefour donde se produjeron los hechos y de tentativa de homicidio múltiple por apuñalar a otras cinco personas que se encontraban en ese momento en el centro comercial, informaron los medios locales.

Según el fiscal encargado de la investigación, existe un "peligro real" de que Tombolini, de 46 años y que se encuentra actualmente internado en la sala de psiquiatría del hospital milanés de San Paolo, "cometa otros delitos graves del mismo tipo" por los que fue arrestado anoche.

El agresor fue detenido gracias a la intervención del exjugador de fútbol Massimo Tarantino, que militó en Bolonia, Inter y Nápoles, que consiguió inmovilizarlo hasta la llegada de la policía

"En un centro comercial hay que pasar un momento de ocio, no encontrar el terror y el miedo a la muerte. Mi más sentido pésame a todos los heridos y, sobre todo, mis condolencias a los familiares de la víctima del loco acto de Assago. Un abrazo a Pablo Mari' desde 'mi' Monza", escribió en sus redes sociales el ex primer ministro Silvio Berlusconi, dueño del club.

El líder del partido conservador Forza Italia, integrante de la coalicion de derechas que ganó las elecciones del pasado 25 de septiembre, añadió que "la seguridad de los ciudadanos debe ser un valor y la clave de la civilización humana. Para ello, el Estado y las autoridades locales deben utilizar todos los medios a su alcance para garantizarla".

El consejero delegado del Monza, Adriano Galliani, visitó a Marí en el centro de Niguarda donde está hospitalizado y donde fue operado esta misma mañana.

"El equipo está conmocionado, hemos pedido a la Liga el aplazamiento del partido contra el Bolonia del lunes", dijo Galliani a los medios a su salida del centro, al que acudió con la esposa del defensa español, de 29 años.

Marí fue operado para reducir el daño muscular causado tras haber sido apuñalado en la espalda y podrá volver a entrenarse en dos meses, según el último parte médico.

Galliani aseguró que, según los médicos, el físico de Marí evitó que el apuñalamiento llegara al pulmón y causara mayores consecuencias para el defensa español formado en el Mallorca: "Si no tuviera músculos de atleta, probablemente el cuchillo se habría hundido", dijo

El ataque se produjo alrededor de las 18.30 horas (16.30 GMT) de este jueves, cuando Tombolini agarró un cuchillo de los estantes del supermercado situado en el interior del centro comercial y comenzó a apuñalar a los presentes, entre ellos al jugador, que se encontraba con su mujer y su hijo.