Vecinos y vecinas de Ventas de Arraitz y del Valle de Ultzama han cortado este viernes la carretera N-121-A (Pamplona-Behobia) a la altura de la travesía de Ventas de Arraitz para demandar una solución a los problemas de inseguridad que genera la vía por el elevado tráfico pesado que soportan y demandar la construcción de una variante con la mayor brevedad posible.

Medio centenar de personas han llevado a cabo el corte de la carretera a las 17.00 horas, bajo la supervisión de agentes de la Guardia Civil, y han recorrido a pie la travesía de Ventas de Arraitz para mostrar su hartazgo por los constantes siniestros que se registran en la localidad.

Obras en los túneles

Imelda Macaya, presidenta del Concejo de Arraitz-Orkin, ha explicado que "la gota que ha colmado el vaso ha sido el último accidente de un camión que salió de la calzada en medio del pueblo" y ha destacado que "se están finalizando los trámites para comenzar al desdoblamiento del túnel de Belate y vamos a sufrir un momento muy crítico, porque al elevado volumen de camiones que ya soportamos se van a añadir los camiones que van a trabajar en las obras para sacar los residuos".

En ese sentido, Macaya ha recordado que" hace 30 años, cuando se construyeron los túneles de Belate, ya fue muy traumático y ahora creemos que va a ser igual o peor. Así que exigimos alguna solución, como la restricción del tráfico pesado, como ya ocurrió cuando se cerraron los túneles hace unos años, y se discriminaron por matrículas pares e impares".

Por su parte, Josu Larretxea, concejal del Ayuntamiento de Ultzama, ha subrayado que "los vecinos viven preocupados, porque es una problemática que viene de lejos. Esta travesía es un punto negro de la N-121-A y, aunque el Gobierno de Navarra proyecta una variante, no sabemos fechas". Por ello, van a solicitar una reunión en los próximos días con el consejero de Cohesión Territorial, Óscar Chivite.