Los centros educativos de Pamplona y la comarca se han convertido en objetivo de ladrones en el presente curso, en el que ya se han registrado decenas de robos con fuerza. En esta situación, la Policía Foral ha dado traslado a las direcciones de colegios e institutos de una serie de recomendaciones de seguridad para prevenir nuevos asaltos. 

Según la información que ha sido trasladada a los centros escolares, desde el inicio del curso escolar hasta principios del mes de abril de 2024 se han denunciado 29 robos con fuerza en centros educativos de la zona policial de Pamplona, concretamente de Pamplona y Comarca. Estos datos son los correspondientes a las actuaciones de la Policía Foral y al resto de Cuerpos de Policía.

Respecto de los hechos conocidos, los ilícitos se han cometido en horario de tarde y noche, fuera de las jornadas escolares. Los autores fuerzan puertas y ventanas para acceder al interior de las aulas y resto de oficinas. La mayor incidencia en algunos de los centros puede deberse a un conocimiento de los recintos por parte de los autores, bien porque son alumnos, exalumnos o cuentan con información que les es facilitada por usuarios de dichos centros. 

Los objetos que se sustraen principalmente son, de una parte, dinero fruto de la contabilidad habitual del centro o cantidades relacionadas con colectas y/o viajes de estudios. De otra parte, dispositivos electrónicos, ya sean ordenadores, tabletas o teléfonos. 

Este material resulta muy atractivo ya que los ladrones consiguen deshacerse de ellos rápidamente vendiéndolos de forma ilegal. El robo de estos dispositivos conlleva un riesgo para el centro al verse comprometidos datos personales, académicos, laborales, económicos, etc, tanto del centro como de alumnos y profesores, así como la pérdida del material educativo que pudieran contener. 

Consejos de seguridad

Para prevenir nuevos ilícitos, desde la Policía Foral se aconseja cerrar todos los despachos una vez terminada la jornada lectiva, así como evitar, en la medida en que sea posible, que el alumnado acceda a las salas de profesores, administración o lugares en que se guarde dinero, en los momentos en que este está siendo manipulado. 

Asimismo, se recomienda revisar las medidas de seguridad y valorar la posibilidad de reforzar los sistemas de alarma en aquellas salas que pudieran considerarse estratégicas (administración, jefatura…); recordar al personal encargado de limpieza que los despachos y aulas deben quedar cerrados; y poner en conocimiento de las jefaturas de los centros aquellas actitudes que pudieran ser sospechosas, así como la detección de personas ajenas a los centros en horarios no lectivos. 

Por último, la Policía Foral anima a comunicar el incrementos de hurtos (materiales, bicicletas, patinetes...) y dar traslado de la información a la unidad de investigación competente y a la Brigada de Análisis e Inteligencia.