Condenado por pegar a dos policías en Pamplona que le denunciaban por volcar contenedores en la calle

El individuo iba tan bebido cuando cometió los hechos, incluso los propios policías lo manifestaron, que incluso su abogada llegó a plantear el juicio que se le eximiera de castigo penal porque tenía anuladas sus facultades por el alcohol. Pero la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Navarra ha considerado ajustado que la embriaguez solo sirva como circunstancia atenuante para rebajarle la pena, pero que este vecino de Pamplona y de origen ecuatoriano sea condenado como fijó el Juzgado de lo Penal 1 a un total de seis meses de prisión por un delito de atentado y a una multa de 240 euros por un delito leve de lesiones. El acusado ha sido condenado por agredir a dos agentes de la Policía Municipal de Pamplona que se encargaban de identificarle cuando se encontraba cruzando y volcando contenedores en las calles de la capital navarra.

Los hechos ocurrieron el 28 de febrero de 2023 hacia las 22.30 horas, cuando la patrulla acudió a un aviso a la calle Río Ega de Pamplona, ya que, según el aviso recibido, una persona estaba cruzando contenedores de basura en la calzada, a la altura del número 8, en el barrio de Azpilagaña. Al llegar al lugar los agentes, uniformados, encontraron al procesado en medio de la calzada, junto a un contenedor de basura vacío volcado en el centro de la calle. Los agentes le preguntaron por lo ocurrido, mostrándose el acusado poco respetuoso y provocador,. Tras su identificación, los agentes le pidieron que abandonara el lugar, comunicándole que iba a ser sancionado administrativamente por su conducta. Al oír tal información, el hombre, que había ingerido bebidas alcohólicas en cantidad tal que le afectaban de manera muy relevante a sus capacidades, reaccionó violentamente, se dirigió hacia el furgón en el que se habían introducido los agentes, golpeando el cristal del copiloto. Luego persistió en su actitud hostil y con desprecio a la autoridad de los agentes, abrió la puerta del copiloto, propinando al agente dos puñetazos con el puño cerrado, impactándole en el costado izquierdo y en la mano.

En esa situación, los agentes le redujeron y le detuvieron. A consecuencia de estos hechos, uno de los agentes resultó con lesiones consistentes en contusión en pulgar izquierdo con ligero eritema y leve dolor a la movilidad, de las que tardó en curar 3 días de perjuicio personal básico, sin secuelas.

La Audiencia, al igual que hizo el juzgado, considera que el acusado no estaba ante una intoxicación plena de alcohol que anulara sus facultades, puesto que "solo podemos concluir que se encontraba en un estado de embriaguez significativo, muy embriagado que dijeron los agentes, pero no en un estado total de embriaguez ni menos aún de anulación total. El hecho de que manifestara que no comprendiera por qué estaba siendo detenido, no significa que no comprendiera nada, sino que solo una discrepancia con su detención, de lo que no es posible colegir la falta total de conocimiento de su acción".