Una treintena de personas han resultado heridas y diez de ellas han sido evacuadas a hospitales aragoneses al desplomarse un telesilla en la estación de esquí de Astún. Según ha relatado a este periódico un monitor de esquí que se encontraba con un grupo de menores, varios de ellos navarros, practicando este deporte en el momento del accidente, "la silla ha tocado suelo y ha rebotado alrededor de tres metros".
El desprendimiento del eje del volante ha causado que las sillas del telesilla se desplazaran "arriba y abajo, como si el cable fuese una goma", asegura. El monitor, que ha preferido que su nombre no sea publicado, ha destacado que la evacuación ha sido "muy rápida" y que ha habido "bastante coordinación" por parte del personal de emergencias, que "en unos 20 minutos ya estaba en el lugar del accidente atendiendo a los primeros heridos".
Según ha contado, "algunas sillas han llegado a girar 180 grados", dejando a los ocupantes "boca abajo sobre un cuarto de hora", hasta que han podido ser rescatados. Otros afectados han permanecido colgados "hasta dos horas".
A pesar del "agobio" y de que "varias personas han salido despedidas" hasta tres metros del telesquí, el testigo ha matizado que "las sillas no se han desprendido completamente", aunque muchas de las personas que se encontraban en ellas en el momento del suceso han saltado al vacío.
El accidente podría haber tenido consecuencias más graves si en las sillas se hubieran encontrado menores de corta edad, asegura: "Si hubiera habido niños de unos 8 años, estaríamos ante una auténtica desgracia", ha afirmado.
