Pamplona vivió un fin de semana marcado por varias actuaciones policiales relacionadas con delitos de violencia e incumplimiento de órdenes judiciales. La más relevante se produjo en la medianoche del sábado al domingo en el paseo de Sarasate, donde agentes de seguridad detuvieron a un hombre como presunto autor de un delito de robo con violencia e intimidación. El detenido habría amenazado y agredido a tres jóvenes con el objetivo de sustraerles efectos personales. Otros tres varones implicados fueron interceptados e identificados, y la investigación sigue abierta, informa Policía Municipal de Pamplona.
Además, durante la madrugada del sábado, en el barrio de Iturrama, se arrestó a un hombre con una orden judicial de búsqueda, detención y personación. La intervención, realizada en colaboración con la Policía Foral, se complicó por la actitud violenta del detenido, que también fue imputado por atentado a agentes de la autoridad.
El sábado por la tarde, en la Rochapea, la Policía Municipal detuvo a un hombre por un presunto delito de maltrato en el ámbito familiar, tras agredir físicamente a su pareja en la vía pública ante varios testigos. Ya entrada la noche, en el centro de la ciudad, fue detenido un hombre por un presunto delito de agresión sexual tras realizar tocamientos no consentidos a una mujer en el interior de un local, siendo retenido por el personal del establecimiento hasta la llegada de los agentes.
La actividad policial continuó el domingo con varias detenciones. En la Plaza del Castillo se arrestó a un hombre con orden judicial de búsqueda, mientras que en la Milagrosa se detuvo a un individuo por intentar un robo con violencia con arma blanca, que finalmente no llegó a consumarse. Más tarde, en el barrio de San Juan, un hombre fue arrestado por quebrantar una resolución judicial, y por la tarde se procedió a la detención de otro individuo por no respetar una orden de alejamiento hacia una mujer.