La primera edición del Navarra Building Fórum (2019) se apoyó en la dimensión empresarial de la construcción eficiente y el Estándar Passivhaus. Aprovechando la presencia de creador del Estándar –Dr. Wolfgang Feist– se organizaron diferentes espacios y relaciones institucionales buscando una ampliación del impacto del propio NBF en otros actores de la sociedad navarra y en el público en general.
La programación y temática de la segunda edición del NBF-2020, (retrasada por la pandemia de la Covid), ha estado orientada hacia el examen de las políticas públicas europeas con respecto a la construcción sostenible y los modos de su aseguramiento de calidad, además de los métodos para incentivarlos e implantarlos. Esto continúa con su dimensión internacional aun cuando ahora está enfocada, genéricamente entendido, a lo público.
NBF, a su vez, explora permanentemente todos los detalles que exhiben su singularidad. Ya sea en la elección de ponentes, de la sede, formatos de interacción, vida del NBF en línea, actos culturales, etc. No son complementos a la programación, muy al contrario, representan el contenido real del NBF y de donde adquieren su significado. Responden a la pregunta de por qué asistir al NBF.
De acuerdo con esto último, en 2020, la Comisión Europea anunció el lanzamiento del Green Deal –Pacto Verde Europeo- y su fondo asociado nextgen, dentro del cual se ubica la denominada European New Bauhaus (NBE) –nueva construcción de la casa o nueva casa europea–, cuyos objetivos y planteamientos coinciden en buena parte con el ánimo que mueve al NBF, (nuevo estilo de vida, diseño, ciudades bellas, estética, cultura, una dimensión sensible para la sostenibilidad, que los ciudadanos vean y toquen, ciudades desde esta perspectiva).
De esta manera, tanto las dos mesas redondas, como la presentación del primer libro dirigido al usuario final de vivienda, así como la puesta en escena; es una invitación clara a sumarse a un cambio imparable que traspasa el edificio y conquista la ciudad.
El ciudadano, pilar de un edificio de altas prestaciones
Desde diferentes frentes la ciudadanía está recibiendo mensajes relacionados con el ahorro energético, la preocupación medioambiental, las nuevas exigencias europeas y como no, la posible recesión en los diferentes sectores productivos. Todo un coctel difícilmente asumible en poco tiempo.
El tema es complejo, por la cantidad de actores que intervienen. Docentes, prescriptores, promotores, constructores… todos ellos se ven obligados a trabajar conjuntamente para avanzar a lo que sin duda es una transformación social y cultural.
Pero el ciudadano, el usuario, también deberá hacer el esfuerzo de crecer en su aprendizaje. Tanto en cuestiones de uso de recursos, tratamiento de residuos, aprovechamiento energético, y como no, también en cuestiones constructivas.
La transformación que se le pide al sector no puede caminar sola sin contar con su principal pilar, el ciudadano. Se necesita un cambio de actitud, un cambio de valores, que ayuden a dicho cambio. Estamos hablando de crear cultura, de crear conocimiento, de crear conciencia. Y esto la sociedad no podrá alcanzarlo a base de multas o prohibiciones, sino a base de convencimiento.
