El autoconsumo energético es una tendencia en auge que cada vez más vecinos quieren implementar en sus comunidades. Sin embargo, vivir en un edificio con varios propietarios implica seguir algunos pasos específicos para realizar estas instalaciones.

En busca de la eficiencia

El primer paso será el de convocar una reunión informativa con los vecinos para dar a conocer las ventajas del autoconsumo fotovoltaico.

Conviene contar con un experto para que exponga detalles técnicos, beneficios económicos y responda dudas. A continuación, será necesario realizar un estudio técnico. Para ello, es recomendable contratar una empresa especializada para realizar un estudio de viabilidad en la cubierta del edificio. Evaluará la orientación, inclinación, superficie y capacidad estructural para soportar el peso de las placas.

Puesto que la instalación afecta a todos los vecinos, será necesario conseguir la aprobación de la mayoría de los propietarios (mayoría simple o cualificada, según la ley de propiedad horizontal) en una junta de vecinos.

Una vez obtenida la mayoría, se deben solicitar los permisos y licencias necesarios al ayuntamiento y a la compañía eléctrica. Las empresas instaladoras son buenas aliadas para ayudar con la tramitación

Es recomendable buscar opciones de financiación como subvenciones, préstamos o fondos europeos. La empresa instaladora puede ofrecer opciones a los vecinos.

Por último, se debe contratar una empresa instaladora homologada. La instalación suele durar entre uno y dos días.

Finalmente, deberemos obtener el certificado de instalación eléctrica y registrar la instalación en el registro de autoconsumo de la comunidad autónoma y empezar a disfrutar de sus múltiples beneficios.