“El Nafarroa Oinez ha unido aún más a la comunidad de la ikastola, lo que ya es un éxito en sí mismo”
El presidente de la Ikastola Zangoza lo tiene claro: pase lo que pase el gran día, la implicación de la comunidad de la ikastola durante todo el año ha sido un éxito
Tras más de un año trabajando en la organización del Nafarroa Oinez, ¿cuál es el balance que se ha hecho desde las diversas comisiones?Texto
Hace poco hicimos una pequeña asamblea de todas las comisiones para esto mismo. Echamos la vista atrás, desde que cogimos el testigo de la ikastola de Etxarri, para ver qué habíamos planteado, cuáles habían sido los objetivos marcados y qué se ha conseguido. Hemos ido realizando las actividades del año y hemos ido cumpliendo con todos los objetivos marcados. Todo ha ido bien, estamos súper contentos. Siempre hemos trabajado desde una postura de auzolan y buen rollo, ha habido muy buen ambiente entre todas las personas que han conformado las comisiones.
¿Cuál cree que ha sido la clave de este éxito?
Somos una ikastola pequeña en un pueblo en el que nos conocemos todos, y eso es clave. Aparte de la ayuda de Marta y Patxi (miembros de la Federación de Ikastolas de Navarra), que es imprescindible, el conocernos ha sido clave. A la hora de plantear las comisiones de trabajo, saber qué perfiles necesitábamos, qué capacidad y conocimientos tiene cada persona ha sido fundamental. Cuando las comisiones tienen un líder o una líder adecuados, y con esto me refiero a una persona que cumple con la expectativas que requiere esa comisión, todo funciona bien. Hicimos una labor de ir llamando a las puertas correctas, en ese sentido. Cada responsable ha formado su equipo, y todo el mundo ha accedido desde el principio. Hemos ido a tope y ha ido muy bien, no puedo decir otra cosa.
¿El hecho de que sea una comunidad pequeña ayuda? ¿Cómo se ha implicado el resto del pueblo, más allá de la ikastola?
La ikastola lleva 46 años y todo el mundo ha ido mamando esa unidad que viene desde el principio, de hacer todo en auzolan y de hacer comunidad. La ikastola está también para el pueblo, siempre que nos piden algo estamos ahí para colaborar. Y de la misma forma, la gente del pueblo nos ha apoyado muchísimo. Siempre hemos venido trabajando de la misma manera y este año ha sido eso mismo, solo que con un poco más de intensidad.
¿Cuánta gente ha participado en las diversas comisiones?
Somos 105 familias y hemos estado todas. Aparte, ex alumnos y alumnas, aitatxos y amatxos… Hemos tirado de eso. También gente voluntaria que no es de la comunidad de la ikastola. La verdad es que ha sido muchísima gente, todo el pueblo el general, los colectivos a los que hemos pedido ayuda, asociaciones...
“El Nafarroa Oinez nos ha dado la oportunidad de tener un altavoz y de poner en el mapa a Zangoza y a Zangozaldea”
La comunidad, por lo tanto, va más allá de las cuatro paredes de la ikastola.
Eso es. Y hay familias que han pasado por la ikastola y que han seguido ampliándose fuera de ella, en el entorno de Zangozaldea hay toda una comunidad que ha surgido de ahí. Estamos muy muy contentos de la respuesta que hemos recibido del pueblo y de la comarca.
¿La ikastola es un agente activo en su entorno, en Zangoza?
Sí, estamos siempre colaborando con todas las actividades que nos proponen desde los diversos colectivos y asociaciones. En fiestas del pueblo ponemos nuestra propia txozna, organizamos el Olentzero junto con el colegio público también... En un pueblo nos tenemos que apoyar, no hay que identificar los actos a los que vamos o no vamos según quién lo organice. Hay que acudir allá donde nos llamen. Más allá de la ikastola, tenemos una zona complicada a nivel demográfico y si no nos ayudamos entre todos y todas no conseguiremos nada.
Por parte de la organización, por lo tanto, todo ha ido bien. ¿Cómo lo ha vivido el alumnado de la ikastola?
Los mayores se emocionan desde el principio y los más txikis no se enteran mucho. Luego, según va llegando el videoclip, la canción, las diversas actividades que se hacen durante todo el año, ya se van emocionando más. Además, hemos querido ponerles en el centro, hacerles partícipes de todo continuamente. Queríamos que se sintieran partícipes desde el principio, que lo recuerden. El alumnado entero está muy implicado, con ganas y con la emoción de que llegue el gran día.
Para los y las adolescentes, Erronka es una de las actividades más esperadas…
Sí, y trabajamos en ello durante todo el curso, también con el objetivo de controlar el tema de los consumos. Erronka es una actividad que les ha dado un objetivo, en la que se implican y ponen en valor el deporte, con una competitividad sana. Están muy a tope con el reto, se lo toman súper en serio, y en el día del Oinez es una de las actividades que más seguimiento tiene.
“La gente se ha volcado con la ikastola, estamos muy contentos con la ayuda que hemos recibido de todo el pueblo y la comarca”
El Nafarroa Oinez tiene unas actividades que ya vienen establecidas durante todo el año, pero es cierto que cada ikastola le imprime su carácter. ¿En este sentido, cuál ha sido la aportación de Zangoza Ikastola?
Todas las actividades que se repiten cada año son eventos que cambian de localidad pero que mantienen su objetivo. Navarra se divide por zonas lingüísticas y educativas con diferentes modelos. En cuanto a la Ikastola Zangoza, creo que hemos sido capaces de demostrar que una ikastola pequeña en una zona bastante castigada por la despoblación puede organizar un Oinez con mucha ilusión. Que no tenemos que estar en una zona geográfica al norte de Iruña para vivir y disfrutar de la cultura vasca. Hemos demostrado que trabajando codo con codo y de forma incansable se pueden conseguir los objetivos propuestos. Que no tenemos que ser una ikastola de 1000 alumnos para tener una fiesta bonita. Creo que nos tenemos que sentir orgullosos y orgullosas. Desde lo rural y en una zona que no se considera euskaldun, los colectivos y la comunidad hemos tenido la oportunidad de darle un altavoz a nuestra zona.
Y viceversa, ¿qué le ha dado el Nafarroa Oinez a la ikastola?
Nos ha dado la oportunidad de tener un altavoz, de poner al Zangoza y Zangozaldea en el mapa. Ha aportado más unidad si cabe entre la comunidad de la ikastola y la satisfacción de poder contar con la comunidad que conforman todas las ikastolas, y eso ya es un éxito en sí mismo. También cierta responsabilidad, porque recibes muchísima colaboración y apoyo. Nos hemos sentido muy arropados en general.
Ahora que estamos en la recta final, ¿con qué momentos se queda?
Hasta la fecha, me quedo con la respuesta que hemos recibido de todo el mundo. Más allá de las situaciones personales, que para mí van a ser inolvidables, con lo que me quedo del global del año es con la idea de que algo estaremos haciendo bien cuando todo el mundo se ha volcado y no ha dudado en venir cuando se le ha pedido ayuda.
“Ha sido un año espectacular, emotivo, positivo y muy bonito, empezamos bien y ha ido todo rodado”
La ikastola cumplió 45 años el año pasado. ¿Se nota el peso del legado?
Sí, claro. Cuando empiezas a organizar el Oinez no sabes la respuesta que vas a tener de la gente y tienes cierta responsabilidad en ese sentido. Hilando con lo que ha sido todo este año, hemos querido escribir un nuevo capítulo en el libro que empezaron las familias que iniciaron el proyecto de la ikastola de Zangoza. Por eso les hemos tenido muy en cuenta, les hemos preguntado por sus vivencias y experiencias, cómo fue el arranque en aquella época difícil… Lo ven como algo normal y con la perspectiva que les da el tiempo. Para esas familias es un orgullo ver toda la evolución que ha tenido la ikastola. El objetivo actual es el mismo que tuvieron en el inicio y creo que lo estamos consiguiendo. La historia de Zangozako Ikastola continuará.
Ya estamos a las puertas del Nafarroa Oinez. ¿Cómo visualiza el gran día?
Estamos organizando el tema del protocolo, por una parte. Estoy centrado un poco en esos actos, que es lo que nos toca hacer. Espero que haga buen tiempo, pero como no está en nuestra mano nos centraremos en lo que podemos controlar, en que sea una buena fiesta, sana y responsable, que la gente venga y disfrute, y que cuando se vaya a su casa se lleve una buena sensación, la sensación de haber pasado un buen día con amigos y familiares. Cuando al comienzo del curso celebramos la primera actividad un poco importante, que es el desfile de la ropa del Oinez, salió todo muy bien, y nos lo tomamos como una señal. Empezamos bien y ha ido todo rodado, así que estamos muy contentos. Independientemente del tiempo que haga, la imagen y la sensación que nos llevamos ya está ahí. Ha sido un año espectacular, emotivo, positivo y muy bonito, y eso ya es un éxito. La verdad es que no puedo decir otra cosa.