La Sierra de Atapuerca (Burgos) se ha consolidado como uno de los asentamientos más antiguos de Europa tras el descubrimiento de una pequeña lasca de cuarzo recuperada en el nivel 7 de la Sima del Elefante de Atapuerca demuestra que los humanos ya se encontraban en el yacimiento hace 1,4 millones de años, 200.000 años antes de lo que se pensaba.

Las evidencias humanas en este periodo son muy escasas y ahí radica la importancia de este descubrimiento a nivel internacional, ya que según han explicado los investigadores, el nivel donde se ha hallado no mostraba signos de actividad humana. Junto a esta pieza se han encontrado otros restos fósiles, entre los que sobresale un hueso de un tobillo hallado en el yacimiento de Cueva Mayor y datado hacia unos 400.000 años. Este último hallazgo permitirá a los expertos conocer las características de los individuos que vivieron en la Sierra de Atapuerca.

En el año 2008, ya se recuperó en la Sima del Elefante un fragmento de mandíbula datado en 1,2 millones de años, que es el resto óseo más antiguo encontrado en la Sierra de Atapuerca.

La excavación ha estado liderada por Juan Luis Arsuaga, José María Bermúdez de Castro y Eudald Carbonell. En esta edición de 2021 han participado 180 personas que han trabajado en los yacimientos, y así se ha recuperado el ritmo normal de excavaciones de antes de la pandemia. La excavación empezó el día 1 de julio y finaliza el próximo día 28

Hallazgos de animales salvajes

Esta campaña de excavaciones deja otros hallazgos de interés para el equipo de investigación , como más de 1.500 restos de fauna y de industria lítica recuperados del yacimiento de Galería.

Además, nueve piezas líticas de hace 700.000 años descubiertas en nivel 8 de Gran Dolina llenan un vacío en el registro fósil y confirman la presencia continuada de humanos en la sierra a lo largo del tiempo.

En este yacimiento también se han encontrado restos fósiles de las especies animales que habitaron Europa hace 900.000 años. Destaca el hallazgo de los ejemplares más completos y mejor conservados de un coxal y la mandíbula completos de un rinoceronte.

Finalmente, en la Sima de los Huesos se ha hallado el cráneo, casi completo, de un oso que vivió con humanos hace 400.000 años y representa un hallazgo de gran importancia, pues se conocen pocos cráneos de su especie tan completos.