eeuu - A lo largo de estos dos últimos años, el estadounidense Michael Reeves ha compartido algunos de sus inventos más extravagantes en su cuenta de YouTube. Durante uno de sus últimos vídeos, el joven aseguró que estaba tratando de hackear un robot aspirador para que este gritara y dijera tacos cada vez que se chocara contra un obstáculo. No obstante, pasaron las semanas y el vídeo del robot aspirador no llegaba. Por esa misma razón, los cerca de dos millones de seguidores del estadounidense acribillaron a Reeves a comentarios para que subiera de una vez el vídeo. Unos comentarios que provocaron que, finalmente, el estadounidense cumpliera su promesa y mostrara en sociedad el tan esperado robot aspirador. Después de instalarle un ordenador a bordo que almacenaba las palabrotas que había grabado con anterioridad, varios sensores ópticos, un altavoz con Bluetooth y un receptor de radio, el joven consiguió un robot aspirador que grita y dice todo tiempo de improperios cada vez que sus sensores detectan un impacto contra cualquier obstáculo. Una vez programado, Reeves decidió poner a prueba el aspirador con varios amigos, quienes asistieron al nacimiento del robot aspirador más grosero del mercado. A continuación, y visto el éxito, el joven decidió llevar el robot aspirador a un centro comercial y captar las reacciones de los diferentes clientes. Los clientes no daban crédito a lo que estaban viendo. Otros en cambio no podían parar de reír.