sudáfrica - Un joven sudafricano fue detenido tras haber pasado un año comiendo gratis en restaurantes de la cadena KFC alegando que trabajaba en las oficinas centrales de la compañía. Cuando llegaba al local, el hombre revisaba las instalaciones, llamaba la atención de los trabajadores y daba consejos para mejorar el servicio, por lo que, debido a esta actitud aparentemente profesional, ningún empleado se atrevió a llevarle la contraria o prohibirle comer gratis. Asimismo, el detenido llegaba a los establecimientos en coches de lujo, vestía con traje y utilizaba palabras técnicas, únicamente conocidas por los trabajadores. La trampa se le acabó cuando un empleado de KFC se percató de que estaba mintiendo y le denunció, tras lo que fue detenido acusado de fraude y suplantación.