La Policía de Coolidge (Arizona, EEUU) anunció el martes la detención de un hombre de 19 años que fingió su propio secuestro atándose las manos y la boca para tener una excusa que le permitiese no ir a trabajar. “Emitimos este comunicado para ofrecer hechos y aclarar una serie de rumores que están circulando en relación a un incidente ocurrido el 10 de febrero”, indicaron el martes en Facebook desde la cuenta oficial de la Policía de esta localidad del desierto estadounidense. Ese día, los agentes respondieron a una alerta de que se había localizado a un joven varón en la calle con las manos atadas a la espalda con un cinturón y un trapo alrededor de la boca que le impedía hablar, como si se tratase de un secuestro.

El joven, que responde al nombre de Brandon Soules, indicó a la Policía que dos hombres enmascarados lo habían secuestrado, le habían golpeado en la cabeza dejándolo inconsciente y lo habían metido en un coche durante varias horas hasta abandonarlo en el lugar en que fue encontrado por los agentes policiales. Sin embargo, las investigaciones posteriores de los agentes determinaron que Brandon Soules se inventó la historia y que se trató sin lugar a dudas de un secuestro fingido, por lo que este fue detenido el 17 de febrero bajo los cargos de proporcionar información falsa a la Policía. Tras su detención, el joven admitió que la historia inicial que había contado no era real y que se la inventó únicamente para tener una excusa que le permitiese no ir a trabajar.