El streamer estadounidense Ludwig Ahgren, unos de los más populares de la plataforma Twitch, decidió lanzar una transmisión sin límite cuyo tiempo se prolonga en 10 segundos adicionales cada vez que alguien se suscribe a su canal. En resultado, el joven estuvo en vivo más de 120 horas.

Los llamados subatones, que son transmisiones que duran mientras el canal recibe nuevos seguidores, son una práctica bastante común en Twitch. El día del inicio de la transmisión, el bloguero se acostó con unas 19 horas por delante, pero cuando se despertó a la mañana siguiente, descubrió que durante la noche el tiempo se había extendido hasta las 29 horas.