La cantidad que Pablo Díaz, el joven tinerfeño que ganó el jueves el bote de 'Pasapalabra', se embolsará dista bastante de la publicitada por el programa, ya que Hacienda se llevará casi la mitad de los 1.828.000 euros que el joven logró al completar El Rosco.

Los premios de concursos televisicos tributan como un rendimiento del trabajo o de la actividad económica, por lo que el importe del premio se sumará al resto de ingresos de la base imponible general de la persona que lo ha ganado. Los premios televisivos están sometidos a una retención del 19% en el momento de su pago, por lo que la cadena de televisión retendrá 347.320 euros del premio que pagará directamente a Hacienda.

Díaz recibirá en su cuenta 1.480.680 euros, pero al confeccionar su declaración del IRPF deberá ingresar 484.420 euros más al fisco. En el ejercicio de renta del 2021, a los importes superiores a 300.000 euros se les deducirá un 24,5%, al que se suma el tipo marginal del último tramo de la comunidad autónoma donde reside el contribuyente.

Como Pablo reside en Madrid, el tipo máximo ascenderá a 45,5%, por lo que la cuantía del bote que se va a llevar Hacienda es de 831.740 euros, dejando al joven con 996.260 euros netos, casi un millón.

Pablo Díaz, de 23 años, se llevó la tarde del jueves el bote con la palabra "Dux", que es el príncipe o magistrado supremo de las Repúblicas de Venecia y Génova. El joven hizo historia como el concursante más longevo del programa tras 259 programas y más de un año.

El joven es un violinista apasionado de la música, cosa que heredó de sus padres. Su padre, Gustavo, es compositor y pianista y su madre, Belinda, profesora de música. La familia reside en Madrid desde que Pablo tenía un año, cerca del Retiro, donde Pablo repasaba roscos mientras paseaba como método de entrenamiento. Como muchos otros concursantes, otra de sus estrategias fue tirar de diccionario.

Díaz se presentó al programa animado por su abuela Conchita, con quien veía el programa en la televisión. Al ver la dificultad del programa, decidió ponerse a estudiar y lleva preparándose desde 2015. Ayer, el joven por fin pudo sacarse la espina que tenía clavada al ganar el famoso bote.