La industria es un sector clave en el conjunto de la actividad económica de Navarra. Un pilar esencial que contribuye al crecimiento, a la mejora de la competitividad, a la generación de riqueza y creación de empleo. Este desarrollo industrial que se ha ejercido durante años del norte a sur de la Comunidad ha generado entornos estratégicos para las empresas, tanto locales como nacionales e internacionales, y de tamaño muy variado, lejos de las grandes urbes como Pamplona o Tudela.

Un ejemplo de ello es el polígono industrial de Lekunberri, que comenzó a desarrollarse hace más de 25 años y que experimentó una primera ampliación hace 10. En la actualidad, alberga a 30 empresas instaladas en unos 350.000 metros cuadrados que generan en, su conjunto, alrededor de medio millar de empleos directos, lo que hace a día de hoy que Lekunberri apenas tenga un 5% de paro. 

 Una de las compañías más destacables de este espacio industrial es Belca. Una empresa familiar que nació en 1990 en Aduna (Gipuzkoa) y que se dedica a fabricar maquinaria de embalaje y a comercializar y distribuir los consumibles de dichas máquinas.

“Con la construcción de la autovía de Leitzaran hace 20 años se dieron las condiciones óptimas para ampliar nuestras instalaciones en el polígono de Lekunberri”, señala Igor Ordozgoiti, director general de Belca. Gracias a esta apuesta, “la compañía ha experimentado un gran crecimiento que, con los años, nos ha llevado a perfeccionar los procesos, obtener certificaciones –como la BRC de calidad y Seguridad Alimentaria– y a investigar y ofrecer soluciones sostenibles”, indica.

En estas más de dos décadas, el Ayuntamiento de Lekunberri ha impulsado diferentes planes para la revitalización industrial, dada su importancia para el desarrollo económico de la zona, así como para la generación de empleo de cercanía y calidad. Se han mejorado las infraestructuras y los servicios de suministros energéticos, de movilidad y vialidad, de urbanización de suelo industrial, entre otros aspectos, para seguir creando oportunidades. 

El proyecto más reciente es el plan estratégico Lekunberri ON. Una apuesta sostenible por mantener y mejorar el bienestar económico y social de la localidad, en la que la colaboración entre el Ayuntamiento y las empresas, asociaciones, entidades, instituciones y centros de formación “ha sido esencial”, recalca Ordozgoiti.

Entre las acciones más relevantes de este plan cabe destacar la creación de la primera comunidad energética de Navarra (TEK Lekunberri ON) de la que forma parte Belca. Junto a otras 16 empresas, el objetivo es realizar instalaciones colectivas en las cubiertas de sus instalaciones hasta sumar una potencia instalada de 3,7 MW. Una inversión estimada de 4,1 millones de euros que supondrá un ahorro de 24,000 toneladas de CO2 en los 25 años de vida útil de los equipos.

Igor Ordozgoiti, director general de Belca Unai Beroiz

Referentes en sostenibilidad

Para construir un modelo industrial fuerte, sostenible e innovador resulta imprescindible abordar retos como el cambio climático. En este sentido, tanto el Ayuntamiento de Lekunberri como Belca comparten este serio compromiso, tal y como se refleja en el patrocinio del club de fútbol o la “gran implicación con el pueblo a través de nuestra política de km0 en la contratación de servicios ofrecidos por la localidad”, explica el director general de Belca.

Para emprender este camino de la sostenibilidad, la empresa destaca la importancia de “rodearse de un equipo joven y dinámico que, en constante formación, se adapte a la evolución del mundo verde”. En esta misma línea, Igor Ordozgoiti apunta que buscan “proveedores con una férrea vocación sostenible para crear relaciones fuertes y duraderas”. Para ello, la compañía guipuzcoana cuenta con Belgreen, una división sostenible que ha desarrollado un Plan de RSC que “nos sirve como guía en el camino y nos permite ayudar a nuestros clientes a emprender a su vez este reto sostenible”. No utilizar agua en los procesos, aprovechar su propia energía que genera mediante paneles solares, reutilizar el excedente, hacer uso de la luz natural o apostar por la movilidad sostenible con autoabastecimiento son algunas de las medidas adoptadas.

Soluciones innovadoras de envasado

Belca lleva más de 30 años como fabricante de una extensa gama de innovadoras máquinas que cubren cualquier necesidad y volumen de envasado. “Por un lado, tenemos la capacidad de fabricar la maquinaria de embalaje en nuestra planta de Aduna. Por otro lado, almacenamos y distribuimos los consumibles de diferentes calidades según la necesidad de cada cliente en nuestra planta de Lekunberri”. En estos 12.500 m2 de almacén logístico, Belca pone a disposición de sus clientes un espacio tanto para dar servicio inmediato a sus necesidades de embalaje (entregas en 24 horas) como para tener almacenadas sus previsiones de pedidos, ahorrando espacio en sus propios almacenes. A su vez, “tenemos la capacidad de cortar, plegar, desplegar, perforar, rebobinar e imprimir materiales diversos”, añade. Asimismo, el director general destaca el SAT como una gran ventaja competitiva, dado que “ofrecemos a nuestros clientes una extensa red de técnicos especializados”.

En la actualidad, la empresa está presente tanto en el mercado alimentario como en el no alimentario ofreciendo materiales susceptibles de ser utilizados en prácticamente todos los sectores de actividad existentes. “En cada lineal de un hipermercado o gran superficie se ofrecen productos con embalajes potencialmente nuestros. Abarcamos desde cárnicos y agrícolas, hasta menaje del hogar y artes gráficas, sin olvidarnos de la automoción y del sector farmacéutico, entre otros”, concluye. 

Datos generales

  • Actividad: Soluciones innovadoras, transparentes y rentables de embalaje alimentario e industrial.
  • Historia: Empresa familiar fundada en 1990. En 2003, traslado del almacén a la nueva nave de Lekunberri. 
  • RSC: No utilizar agua en los procesos de almacenamiento y manipulación, aprovechar la energía generada por paneles solares, cuidar y respetar el entorno, reutilizar el excedente, hacer uso de la luz natural, reciclar los residuos y apostar por una movilidad sostenible gracias al autoabastecimiento.