UPN de Tudela se ha negado a realizar una declaración institucional sobre el ataque terrorista de Hamas y el posterior ataque militar de Israel por temor a si hacerlo “pudiera generar enfrentamientos o violencia en las calles”. Así lo han señalado desde el grupo municipal Contigo Tudela quien hoy han tratado de consensuar una declaración unánime con todos los grupos. En un comunicado el portavoz, Eneko Larrarte ha señalado que “diez días después del brutal ataque terrorista de Hamas sobre población israelí y tras la terrible respuesta del estado de Israel realizada indiscriminadamente contra el conjunto de la sociedad civil palestina, el grupo municipal de Contigo Tudela ha propuesto la posibilidad de consensuar una declaración institucional unitaria para condenar ambos ataques sobre la población civil y solidarizarnos con las víctimas y mostrar unidad en la defensa de los derechos humanos vulnerados en la zona”.

Dentro de esta intención han planteado, según han señalado, la necesidad de una posición de unidad frente a la horrible situación que existe hoy en Israel y Palestina. “Es un tema en el que deberíamos hacer un esfuerzo por ponernos de acuerdo independientemente de la posición concreta de cada cual” asegura Larrarte, “sin embargo UPN nos ha trasladado que no creía oportuno hacer una declaración institucional porque pudiera generar enfrentamientos o violencia en las calles”.

Contigo Tudela afirma no compartir que frente a un conflicto bélico no se busque trasladar una imagen de de unidad en base al respeto a los derechos humanos, que podría generar más complicidades en nuestra sociedad en busca de la resolución pacífica del conflicto”, añadía Larrarte.

Este grupo municipal en el Ayuntamiento de Tudela iba a solicitar la convocatoria para un minuto de silencio en recuerdo de todas las víctimas de ambos bandos del conflicto al tiempo que condenan “firmemente el asesinato y secuestro de civiles pertrechado por la Hamas así como el brutal ataque del estado de Israel contra la población civil gazatí y palestina en general”, y exige como base para el fin del conflicto el reconocimiento de las fronteras establecidas en 1967, así como la muestra de solidaridad con la guerra de ocupación que “desde hace 75 años ejerce Israel” y la petición de que no se acabe con ningún programa de ayuda a Palestina y de que el Gobierno de España actúe como mediador.