Alberto Ammann (Córdoba, Argentina, 1978) saltó a la fama con 'Celda 211'. Con su personaje ganó el Goya como mejor actor revelación. Ahora está al frente de la serie de Netflix 'La noche más larga'.

1. Teatro en el jardín de infancia. Su interés por la interpretación le llegó en el jardín de infancia. El teatro y la música le acompañaron con asignaturas durante toda su etapa escolar.

2. Exilio con un mes de vida. Nació en plena dictadura argentina. Su padre fue un periodista de la oposición y viajó a Madrid huyendo de la situación, el actor era un recién nacido.

3. Sus maestros. En el Estado español conoció a Juan Carlos Corazza y en su estudio a Ana Gracia, Rosa Morales y Manuel Morón. Todos ellos han sido su fuente de aprendizaje.

4. Sueño cumplido. Con su pareja, Clara Méndez-Leite, ha podido cumplir el sueño de montar una escuela de interpretación y gestionar un pequeño teatro en Lavapiés.

5. Sus contradicciones. Dentro de este actor hay varios Albertos: el ilusionado, el cascarrabias, el tierno y el que un día dijo que lo suyo era hacerse el interesante para poder obtener mejores resultados en el arte de seducir.

6. Personajes malvados. Su personaje en 'Narcos' fue malvado y a él le divirtió mucho hacerlo. Pero quiere olvidarse de los malos y volcarse en otros perfiles más humanos y más conectados con la realidad.

7. Una situación desconocida. En 'Narcos' tuvo una escena en la que tuvo que besar a un compañero. Pidió consejo a otros actores para asumir el beso con un hombre, algo nuevo para él. Salvó la situación, pero al principio le dejó perplejo.

8. Sin parar. La vuelta a la normalidad tras la pandemia le ha pillado con la agenda llena de proyectos, que le ha obligado por ejemplo a viajar a países como México. No se queja de su relación con el trabajo. No para y se siente afortunado.

9. Córdoba, en su corazón. Después de volver a Argentina vivió en Córdoba hasta que a los 23 años regresó a Madrid. Pero siempre que su trabajo se lo permite se acerca a su ciudad natal, un lugar que lleva muy dentro.

10. Periodista y políticos. En su familia abundan los periodistas y los políticos. Él es el verso suelto familiar. Nunca tuvo pegas para desarrollar su profesión, ni cuando a los 17 años confesó a sus padres que su vocación estaba en los escenarios y delante de las cámaras. No se encontró con ninguna oposición.