A estas alturas de la película no me ha quedado claro aún si el cambio de días en la semifinal de Copa le ha venido bien o mal a Osasuna, pero lo que está claro es que los rojillos tienen un mes para poder llegar en las mejores condiciones físicas y anímicas y afrontar ese duelo contra el Athletic totalmente enfocados en esos dos partidos tan ilusionantes para la entidad y su afición.

Para eso va a ser fundamental que Osasuna llegue con el máximo colchón de puntos para evitar, como apuntaba Braulio en la previa, el fenómeno que sufrió el Rayo, entre otros, temporadas atrás. Y ahí es donde escuece principalmente haber perdido dos puntos en Cornellá. 

Sí, sacar un punto fuera de casa casi nunca se puede considerar algo negativo, pero los rojillos han dejado escapar cuatro puntos en los dos últimos encuentros que ha disputado lejos de El Sadar. Contra el Elche y contra el Espanyol. 

Para esas semifinales será fundamental que Osasuna cuente con un Budimir más entonado. El gol que marcó en Cornellá es de delantero puro, de área, algo que necesitaba un jugador que basa en la confianza buena parte de su rendimiento. Se ha visto en otras temporadas, el croata siempre acaba mejor de lo que empieza. Ojalá este gol solamente sea el inicio de una buena racha como la que ha tenido en temporadas pasadas.

Pero más allá de eso, Osasuna tiene que aprender dos cosas de su encuentro contra el Espanyol. El primero, a jugar con 10. Habrá que preguntar a Gil Manzano si lo que ocurrió entre Abde y el defensa del Espanyol es como para expulsarlos a dos. Pero, una vez realizada la aberración, Osasuna no supo adaptarse a la nueva circunstancia.O, mejor dicho, el Espanyol le sacó mucho más rédito a la situación. 

La segunda cosa que tiene que aprender el equipo de Arrasate es a vivir sin Torró. El centrocampista es sostén del juego del equipo pero, otra vez, cuando falta se nota en exceso. Braulio tiene trabajo para verano. Esa posición tiene que estar doblada con un jugador de su perfil, ya sea en el mercado o en la cantera, donde algún Promesa justamente destaca jugando como ancla del equipo. Veremos a ver. De momento, Osasuna está en buenas condiciones, pero tendrán que ser mejores.