El Parlamento de Navarra avala la rebaja fiscal para rentas medias y bajas que plantea el Gobierno, pero que todavía está pendiente de concretar. Los partidos muestran además algunos matices diferentes en cuanto a la implicación de la reforma tributaria, lo que va requerir una negociación que garantice su aprobación con el objetivo de su puesta en marcha a partir del 1 de enero, tal y como plantea el Ejecutivo foral.

Según avanzo el pasado miércoles el consejero de Hacienda, José Luis Arasti, el Gobierno trabaja en una deflactación del IRPF para los ejercicios 2023 y 2024, así como en una mejora de los mínimos personales y familiares. Dos propuestas que venía reclamando UPN en los últimos meses, y que ayer llegaron a pleno en forma de moción de la mano de la formación regionalista. “Hemos forzado que el Gobierno hiciera su propio anuncio sin ni siquiera dar detalles por la premura para adelantarse a este debate”, celebró su portavoz en materia económica, María Jesús Valdemoros.

La portavoz de UPN se mostró satisfecha con que el Gobierno haya asumido la deflactación, pero reclamó que sea ambicioso en su aplicación para que realmente compense la inflación de los últimos años. En concreto, UPN proponía una deflactación progresiva de entre un 7% y un 9,5% hasta rentas de 50.000 euros, un aumento del 5% en las deducciones por mínimos personales y familiares, y un incremento del 9% en las deducciones por trabajo para rentas inferiores a 50.000 euros.

Además, Valdemoros avanzó que su partido va a proponer que la deflactación de la tarifa del IRPF, que supone reducir los tipos impositivos para compensar la inflación, esté reconocida por ley y sea automática cada año. “Debe tener carácter anual para que no sea el aguinaldo tributario de cada año”, reclamó la parlamentaria. No parece sin embargo que la propuesta vaya a tener éxito. De entrada, la iniciativa de UPN ayer solo logró el apoyo de PP y de Vox. El resto de grupos marcaron distancia con la política fiscal de la derecha y se emplazaron a un acuerdo en el marco de la negociación del paquete de medidas tributarias para el próximo año que prepara el Gobierno. 

María Jesús Valdemoros, de UPN. Patxi Cascante

En el turno a favor, la portavoz del PPN, Irene Royo, ha asegurado que "Navarra necesita rebajas fiscales" y ha lamentado que la Comunidad foral "lleva ocho años perdiendo competitividad fiscal" como consecuencia de "gobiernos progresistas que no progresan". Ha considerado que la deflactación del IRPF anunciada por el Gobierno foral es "una victoria de la oposición que ha hecho que el Ejecutivo navarro reaccione". Ha advertido de que "vamos con retraso" respecto a otras Comunidades Autónomas y ha asegurado que Navarra tiene el IRPF "menos competitivo" porque "tienen que hacer frente a la elefantiásica estructura del Gobierno de Navarra".

Emilio Jiménez, de Vox, ha señalado que "la galopante inflación" afecta "a todos por igual, disminuye el poder adquisitivo de las familias y beneficia a los gobiernos al implicar más recaudación". Ha destacado que "comenzamos a ver cómo la ciudadanía comienza a exigir ajustes para hacer nuestro sistema tributario una herramienta equitativa". A ello ha sumado el "infierno fiscal" en Navarra que "incide en menor poder adquisitivo, menor consumo y emprendimiento, deslocalización de empresas y mayores cuotas de IRPF".

Ainhoa Unzu, durante su intervención. Patxi Cascante

Por el contrario, la socialista Ainhoa Unzu ha considerado que la moción de UPN busca "confrontar" con una propuesta que supone una "triple deflactación de la tarifa" que "no ha sido ni pactada ni dialogada". "Exigen lo que saben que es absolutamente inviable porque así tienen un relato para votar que no a la ley de medidas fiscales", ha acusado a los regionalistas. Ha destacado que el gobierno de María Chivite ha aplicado "ingentes baterías de medidas para proteger las rentas de toda la ciudadanía", que no ha sido apoyadas por las formaciones de la derecha, entre ellas la deflactación de la tarifa en 2019 al llegar Chivite al Gobierno.

Por parte de EH Bildu, Laura Aznal ha opinado que la deflactación "puede ser interesante y aliviar los bolsillos de los navarros" pero no puede ser una "medida asilada porque necesariamente deber venir acompañada de otras medidas para ayudar a las personas que peor lo están pasando". Ha criticado que en UPN "se empeñan" en calificar a las rentas de hasta 50.000 euros de "rentas medias" cuando el salario medio anual "no llega a los 30.000 euros". Y ha mostrado la disposición de la coalición de estudiar la propuesta de deflactación que plantee el Gobierno de Navarra.

El representante de Geroa Bai Mikel Asiain ha pedido a Valdemoros que "no caiga en el engreimiento de creer que -la deflactación- se aplica porque usted la había solicitado". Ha recordado que UPN no apoyó las medidas tributarias de 2020 y 2022, en las que se deflactó la tarifa, ni las medidas para paliar las consecuencias por la guerra de Ucrania. "No aplicaron ustedes ninguna de las medidas que ahora reclama durante la crisis anterior, la de 2008, en la que la única receta fue la de los recortes", ha recalcado. Por otro lado, ha mostrado su satisfacción por el anuncio del consejero Arasti de incluir en el proyecto de ley de medidas fiscales una propuesta de deflactación.

Miguel Garrido, de Contigo-Zurekin, ha pedido a UPN "un poquito de prudencia a la hora de concretar" una medida que ha considerado "ideológica y que "no es justa". "Si hiciéramos una deflactación lineal estaríamos haciendo una deflactación regresiva a las familias navarras" porque el impacto en las familias de la inflación "en función de la renta ha sido desigual". Ha pedido que "al menos sea neutro" y no "tenga un efecto regresivo".