Las agencias de viajes de Navarra se encuentran en una situación más que complicada a raíz de la crisis sanitaria y económica de la covid-19. De hecho, el sector no ha facturado nada este año y prácticamente ha tenido que devolver el 100% de las reservas. Esta situación se ha visto agravada por el cierre perimetral de Navarra decretado el pasado 22 de octubre, que previsiblemente se prolongará hasta el próximo 16 de diciembre. Por ello, los navarros y navarras no podrán viajar en el puente foral y el sector deposita todas sus esperanzas en la Semana Santa de 2021.

Además, la situación les obliga a aguantar al menos otros seis meses más. En esta línea, el presidente de la Asociación Navarra de Agencias de Viajes (ANAVI), Juanchi Patús, alertó que "estamos casi con las manos y con los pies cogidos, porque no estamos cerrados obligatoriamente, pero en realidad no podemos vender el producto porque Navarra está cerrado perimentralmente". Ante esta situación, varias agencias han decidido cerrar sus puertas hasta que la situación les permita retomar su actividad. A pesar de ello, advirtió que en algunos casos el cierre temporal se puede convertir en definitivo.

un año sin ingresos Sobre este año, Patús expresó que en su momento "hablamos de que iba a ser catastrófico, pero ahora diría que va ser caótico", porque adelantó que "efectivamente vamos a acabar el año en el sector agencias de viajes sin un ingreso, sin un beneficio y con unos gastos que van exponencialmente cada día a más". Es por ello que advirtió que ahora mismo el sector de viajes necesita "más que una ayuda, un rescate", porque "lleva desde el 1 de enero sin facturar y sin cobrar, porque "nuestra facturación de enero y febrero, no era tangible, era una venta a posteriori, que se iba a realizar en marzo, abril y mayo, al no realizarse todo lo que habíamos vendido en enero y febrero, lo hemos tenido que devolver".

Han tenido que devolver todo precisamente en un año en el que las previsiones de venta era mejores respecto a ejercicios anterior. Según explicó, las reservas que se habían dado en enero y febrero "eran muchísimo mejores que las de otros años, porque el turismo estaba creciendo" y los viajes de Semana Santa con las diferentes ofertas que las agencias de viajes navarras habían preparado para viajar con esos vuelos chárter desde Pamplona, "estaban en una venta de un 70% a un 80% en enero y febrero, cuando en otros años no llegaban al 50%". Sobre la devolución de los importes de las reservas, adelantó que "más que en cantidad, que en calidad". De hecho, subrayó que han perdido "un arma importante" que tenían conseguido año tras año con la continuidad de viajar.

aguantar seis meses más El sector se enfrenta a un verdadero reto de cara al próximo año, porque tras llevar ocho meses sin facturar, aún deben mantener el pulso durante otros seis meses más con la mirada puesta en Semana Santa. Las agencias de viajes, al no trabajar con productos tangibles que además se disfrutan a posteriori, por mucho que ahora mismo se consiguiera una vacuna eficaz y se pudiera empezar a hacer una vida normal, "necesitamos tres o cuatro meses para empezar a trabajar normalmente", expresó Patús.

En esta línea, aclaró que pueden vender mucho a principios de año, pero que es "una venta ficticia porque en realidad como pronto, el año que viene el servicio se va a dar en Semana Santa". Entonces, "tenemos que aguantar nuevamente otros seis meses mínimo y esto ya es bastante duro de pasarlo" porque, el sector está "ya muy tocado y ahora lo que exigimos al Gobierno es que se acuerde de las agencias de viajes y que más que una ayuda, lo que necesitamos es un rescate".

Sobre el sector de agencias de viajes en Navarra Patús recordó que "es un sector de una calidad suprema y exquisita, a diferencia de otras comunidades, tanto a nivel profesional como a nivel de imagen, de físico, en el sentido de oficinas" y añadió que "es un sector que siempre ha estado ahí, que son personas, no folletos ni ordenadores, que miran y que asesoran a sus clientes, cosa que hoy en día al emplear un ordenador o un móvil para realizar una reserva, es más difícil que les hagan un buen seguimiento".

En el caso de tener que realizar una reclamación, recordó que "no es lo mismo hacerla, si es que es posible a través de un ordenador o un teléfono, que hacerla personalmente en una oficina de agencia de viajes". De cara al próximo año, Patús destacó que una buena forma de reconocer a estos profesionales "sería que reserven viajes con nosotros (cuando la situación empiece a cambiar, por suerte en breve), porque muchas familias dependen de esos puestos de trabajo".

Devoluciones. El sector ha tenido que devolver todas las reservas previstas para este año ante la imposibilidad de viajar por la pandemia.

Abiertos pero sin vender. Las agencias de viajes pueden seguir abiertos pero no pueden vender sus productos debido a la situación sanitaria. Aún así, algunas agencias han decidido seguir abiertos para atender a los clientes en caso de cualquier duda o necesidad.

Gastos fijos. A pesar de no facturar, el hecho de abrir la persiana todos los días, obliga al sector a pagar una serie de gastos fijos de Internet, teléfono, seguros, electricidad, etc.

Un año sin facturar. El sector no ha facturado nada durante este año. Las ventas previstas en enero y febrero eran reservas para Semana Santa que tuvieron que ser canceladas por la situación sanitaria y por el confinamiento.

"Estamos con las manos y con los pies cogidos; no estamos cerrados, pero no podemos vender"

Presidente de ANAVI