Los juzgados navarros especializados en Violencia sobre la Mujer (el de Pamplona es exclusivo en la materia mientras que los de Tafalla, Estella, Aoiz y Tudela son mixtos y reciben también asuntos de otra índole) suspendieron en 33 casos las visitas a sus hijos por parte de padres maltratadores que habían sido denunciados por episodios de violencia sobre la mujer.

Si bien las cifras adquieren una relevancia singular si se comparan con anualidades anteriores (hay que tener en cuenta que en 2020 solo se habían suspendido dos visitas de este tipo en Navarra mientras que en 2019 las anulaciones afectaron a tres encuentros con descendientes), los juzgados navarros consideran que la reforma del Código Civil que obligaba a retirar las visitas a padres maltratadores (aun cuando no fueran a prisión, sino que fueran denunciados y hubiera indicios de violencia) se está aplicando de manera mucho más residual y equilibrada de lo que marca la rigidez legislativa.

Ello es así porque la normativa permite también que en base al interés superior del menor se pueda mantener el contacto con el progenitor, aunque este haya sido denunciado por un episodio de malos tratos. Es decir, subraya la jueza de Violencia de Pamplona, Esther Fernández-Arjonilla, "este tipo de decisiones no se pueden tomar en todos los casos porque de hecho es un derecho de los menores el poder estar con sus padres, no es al revés. Y en caso de que se deje de tener contacto, el poder recuperarlo meses o años más tarde va a ser un camino lleno de dificultades si no se aprecia riesgo evidente".

Sobre la modificación de ese artículo 94, que entró en vigor en septiembre, para acotar el contacto de menores con padres maltratadores, la jueza de Pamplona afirma que "la ley fija que se adopte dicha suspensión del régimen de visitas, o en caso de que no hubiera establecido previamente dicho régimen que se anulen los encuentros con sus hijos, siempre que el padre vaya a prisión provisional. Eso no tiene vuelta de hoja, no hay margen para la interpretación de la ley en ese sentido y la supresión es total. Pero antes de esta norma, ya eran muy pocos los casos de padres que ingresaban en prisión por violencia machista y querían seguir teniendo visitas de los menores", advierte la magistrada.

Así, hasta 26 padres fueron enviados como medida cautelar a prisión provisional en Navarra durante el año pasado y se les impidió por tanto seguir viendo a sus hijos después de esa denuncia inicial. Pero en el supuesto de que el agresor no sea enviado a prisión preventiva, la suspensión de las visitas a sus hijos queda a expensas de una evaluación más concreta del caso individualizado y no se toma una decisión al respecto si la madre víctima de violencia no lo solicita expresamente. En tal caso, se incoa un procedimiento civil que debe ser ratificado en el plazo de un mes por parte de la madre. Pero son supuestos que apenas ocurren.

Las cifras de maltratadores enviados a prisión y que no han podido seguir viendo a sus hijos resulta también de lo más reducida y evidencia la escasa repercusión el cambio legislativo si se tiene en cuenta que durante 2021 se registraron 1.630 denuncias en los órganos judiciales navarros.

Todos los procedimientos citados que se han denunciado fueron presentados por mujeres -928 españolas y 702 extranjeras (el 43,1% del total)-, unas cifras menores que las de 2020, cuando el número de denuncias totales se situó en 1.796, de las que 1.773 fueron interpuestas por mujeres, 990 españolas y 783 extranjeras (44,2%). Se dictaron un total de 355 órdenes de protección en favor de las mujeres denunciantes y en muchos de los casos también para proteger a los menores.

MÁS VIOLENCIA EN NÚMERO Y GRAVEDAD

Por último, la jueza de Violencia reflexiona habida cuenta de los últimos casos que han llegado a su juzgado y llama la atención sobre la corta edad de muchos de los intervinientes -tanto agresores como víctimas- y de las relaciones de cada vez menos tiempo que acaban en situaciones de violencia. "Nos ha llegado algún caso de una chica joven que en la tercera cita, a los 15 días de conocerse, ya había recibido un golpe y una patada". El aumento de violencia machista en lo que va de año está siendo en torno a un 7% y ha habido 6 maltratadores que han sido enviados a prisión directamente tras la denuncia.

LA FRASE

"No es un derecho de los padres, es un derecho de los niños el decidir si quieren seguir viéndoles"

Esther Fernández-Arjonilla

Jueza Violencia sobre la Mujer