Los días a más de 30 grados en Navarra han incrementado en un 200% desde 1950. Es un dato que hizo oficial Teresa Ferrer, jefa de la sección de Sanidad Ambiental del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), en una ponencia acerca del impacto del cambio climático en la salud que tuvo lugar este viernes en el Paseo Sarasate. Esta charla se enmarca dentro de los encuentros Life NAdapta, un proyecto impulsado por el Gobierno de Navarra que promueve la resiliencia frente al cambio climático en la comunidad foral.

Ferrer, durante su exposición, hizo hincapié en los retos que como sociedad tenemos por delante para adaptarnos al cambio climático. “Estamos ante una emergencia climática urgente en todo el planeta, y como en otros rincones del mundo, Navarra también se está viendo afectada por el incremento de las temperaturas”, señaló.

La Unión Europea establece el ascenso de 1,5 grados de temperatura media como un escenario de riesgo para el planeta. En Navarra, desde 1950, la temperatura ha aumentado 1,3 grados, lo que está muy cerca de entrar en una situación preocupante. “Debemos entender que la salud no es solo individual, sino planetaria. Debemos proteger y respetar el planeta para que podamos vivir en plenas condiciones de bienestar”, afirmó Ferrer. La experta aseguró que “el calentamiento global puede producir enfermedades pero sobre todo puede agravar aquellas que la gente ya padece, como por ejemplo, problemas del corazón o enfermedades que afectan a la movilidad”, y añadió que ”cuando hablamos de salud, no solo hablamos de enfermedades, también de bienestar físico y mental”. Ferrer concluyó con una frase que fundamenta la cooperación y el trabajo contra el avance del cambio climático: “la salud de cualquier persona en cualquier lugar es la salud de todos en todas partes”.

Planes del Gobierno

Navarra alcanzó en 2022 las temperaturas más altas desde que existen registros; durante 37 días, la Comunidad Foral supero temperaturas de 34 º C. Según un informe del ISPLN, los años más calurosos fueron 2022 con 37 días y 2003 con 34 días, el 40% y 37% de los días de verano en ola de calor, respectivamente. Se estima que el número de días en ola de calor (>34 °C) ha aumentado en 7 días desde el 2000. Además, las prospecciones técnicas que, con metodología científica, permiten a Navarra proyectar datos a largo plazo predicen que las olas de calor van a ir incrementándose en un 60% durante el próximo medio siglo.

Para hacer frente a las consecuencias de estas altas temperaturas, el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno foral, a través del proyecto LIFE-IP NAdapt-CC, desarrolla estrategias para adaptar viviendas, espacios públicos o condiciones de trabajo al incremento de las olas de calor. En concreto aboga por impulsar planes públicos de rehabilitación de edificios, regulaciones laborales específicas, protección de población vulnerable o creación de llamados refugios climáticos de zonas verdes o de sombra en los espacios públicos. Asimismo, el ISPLN desarrolla un plan de prevención de los efectos en salud del exceso de temperaturas y de la contaminación del aire en Navarra para concienciar y adoptar medidas. l

Recomendaciones

-Informarse. EL ISPLN recomienda conocer los tipos plínicos a los que se tiene alergia y los periodos de polinización de las plantas que lo producen, además de tener en cuenta las concentraciones y nivel de polen en el aire, que aumentan con tormentas de alto contenido eléctrico y vientos fuertes.

-Medidas personales. Recomiendan utilizar gafas de sol, cuidar la higiene en manos y cara, evitar las actividades al aire libre en las horas de mayor concentración de polen y seguir las pautas de la medicación.

-Al viajar. Si el desplazamiento se hace en coche, se debe hacer con las ventanillas bajadas. Recomiendan evitar salidas al campo.