jerusalén - El primer ministro en funciones de Israel, Benjamin Netanyahu, reunió ayer a su Gabinete en el Valle del Jordán, en la Cisjordania ocupada, y aprobó la regularización y extensión de una colonia judía de la zona a dos días de los comicios. El Ejecutivo autorizó el asentamiento, ya levantado sin permiso gubernamental previo, y anunció que permitirá su ampliación más allá de los límites que hoy ocupa.

Netanyahu adelantó la semana pasada su intención de anexionar el Valle del Jordán, si era reelegido, y ayer aprobó regularizar una de sus colonias, medida a la que inicialmente se había opuesto el fiscal general del Estado por considerar que podía ser propaganda política, pero cuya objeción retiró ayer, según el digital Times of Israel. La aprobación definitiva de la colonia, matizó Netanyahu, será “con el establecimiento del próximo Gobierno”.

El pasado martes, el jefe del Ejecutivo prometió que, en caso de ganar las elecciones y formar Gobierno, aplicaría la soberanía israelí en el Valle del Jordán, fronteriza con Jordania, y que constituye alrededor de un 30% del territorio cisjordano.

La anexión de esta región será un paso previo “a la aplicación de la soberanía israelí sobre todas las comunidades (judías) de Judea y Samaria (denominación bíblica para Cisjordania)”, incluidos los bloques de asentamientos y otras áreas que considera “esenciales” para la seguridad israelí, remarcó ayer el primer ministro.

Según este, todo el plan constará en el llamado Acuerdo del Siglo, que elabora la Administración estadounidense del presidente Donald Trump para activar negociaciones entre israelíes y palestinos.

Estas medidas se interpretan como un guiño para arrastrar el voto de los colonos judíos que viven en los asentamientos de los territorios palestinos ocupados de Cisjordania y Jerusalén Este, unos 600.000 israelíes. En el Valle del Jordán, que Netanyahu ve crucial para la seguridad de Israel, viven unos 60.000 palestinos y 9.500 colonos judíos distribuidos en 37 colonias, según datos de la ONU. - Efe