barcelona - Un juez de Cornellà citó a declarar como investigados para el próximo diciembre a siete miembros de la cúpula de los Mossos d’Esquadra, entre ellos el exjefe del cuerpo Ferran López, por un delito de desobediencia, por su supuesta pasividad al impedir el referéndum del 1-O. En un auto, el titular del juzgado de instrucción número 3 de Cornellà acuerda esas imputaciones, después de que la magistrada de la Audiencia Nacional Carmen Lamela rechazara asumir la causa por desobediencia que el magistrado le remitió, para que la uniera a la investigación sobre el mayor Josep Lluís Trapero. Entre los investigados figura el adjunto de la Prefectura de Mossos, que sustituyó a Trapero como jefe de la Policía catalana cuando éste fue destituido por la activación del artículo 155 de la Constitución, así como el jefe de la Comisaría de Superior de Coordinación Central, Joan Carles Molinero.

El juez ha encargado a la Guardia Civil que analice la documentación de la Prefectura de Mossos relacionada con su actuación ante el referéndum del 1-O, para que determine su “forma de actuación” con el fin de averiguar si las decisiones se toman de forma jerárquica o colegiada. La investigación del juez se centra en la “elaboración, aprobación y cumplimiento de las pautas de actuación” de los Mossos ante el 1-O, así como “los efectos de dicho despliegue policial a la hora de dar cumplimiento” a la orden del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya de impedir el referéndum. - Efe