MADRID. El presupuesto consolidado -que incluye Estado, Seguridad Social y organismos autónomos, agencias estatales y organismos públicos- de gastos no financieros asciende a 345.358 millones de euros, un 5,3 % más que en 2018, mientras que los ingresos no financieros alcanzan 316.181 millones, un 7,8 % más.

De acuerdo con los datos del proyecto presupuestario de 2019 entregado hoy en el Congreso de los Diputados, el Estado absorberá el 45,5 % del total del gasto; la Seguridad Social, el 42,1 %; los organismos autónomos, el 10,4 %; y otros entes públicos, el 2 % restante.

El presupuesto consolidado de gastos, que incluye las operaciones financieras, asciende a 472.660 millones, un 5,1 % más que en 2018.

De estos gastos, la partida más importante corresponde a transferencias corrientes, que representan un 55,4 % del total del gasto y suman 261.961 millones, un 6,3 % más que en 2018.

La mayor partida de gastos consolidados, el 57,3 %, se destinará al gasto social, seguida por las actuaciones de carácter general, con un 28 %, las de carácter económico (8,9 %) y los servicios públicos básicos (5,7 %).

Si se atiende a la distribución de políticas de gasto consolidado, excluyendo el préstamo a la Seguridad Social, la cifra se sitúa en 365.520 millones de euros, un 3,1 % más que en 2018, de los que el 42,1 % será destinado a cubrir las pensiones (153.864 millones).

El total de los ingresos consolidados, que incluyen los activos financieros, ascienden a 324.713 millones, un 7,9 % más que en el presupuesto inicial de 2018.

La mayor parte de estos ingresos, el 68,9 %, se obtendrá de los impuestos directos y cotizaciones sociales, que alcanzan los 223.614 millones, lo que representa un aumento del 6,5 % respecto al presupuesto del año pasado, mientras que por impuestos indirectos se ingresarán 54.627 millones, un 15,8 % más que en 2018.

Las tasas y otros ingresos suman 14.523 millones, cifra que supone un 4,5 % del total de los ingresos consolidados y registra una bajada respecto al año anterior del 0,8 %.