pamplona - La Red de Personas Torturadas en Navarra anunció ayer su intención de reunirse con todos los partidos que vayan a presentarse a los próximos comicios forales, así como con el Foro Social, a quienes pedirá que en su programa electoral “incluyan un compromiso claro con la necesidad de realizar una investigación oficial” al respecto, “amparada e impulsada” por el Gobierno foral.
Fueron las portavoces de este colectivo, Mariló Gorostiaga y Gloria Bosque, las encargadas de trasladar esta demanda. Lo hicieron delante de las mil sillas vacías colocadas en la plaza del Castillo para simbolizar las personas que han sufrido la tortura en Navarra. La iniciativa creó expectativas entre los numerosos paseantes y despertó su interés por conocer los motivos de este despliegue de sillas.
“Cada una de estas mil sillas vacías simboliza una persona torturada, un testimonio sobre la crueldad de esta práctica”, explicaron Gorostiaga y Bosque, que se encargaron de leer, en castellano y en euskera, el comunicado de denuncia de esta práctica. Las portavoces consideraron que “es imprescindible reconocer que la tortura ha sido una realidad sangrante también en Navarra”. Añadieron que “las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han mantenido un sistema que ha torturado durante años, amparados en la permisividad de la judicatura y la inacción de las instituciones”.
“Investigar lo ocurrido es un paso imprescindible”, destacaron Gorostiaga y Bosque, que subrayaron la necesidad de que “se haga de forma científica, como lo ha hecho el Gobierno Vasco. Podría hacerse de forma particular, a través de una campaña de crowdfunding, pero queremos que se haga de forma oficial”, precisaron.
Además, recordaron que “existen protocolos científicos reconocidos a nivel internacional para poder hacerlo con veracidad”, si bien para ello “únicamente hace falta voluntad política”.
Por ello, avanzaron su intención de reunirse “con todos los agentes políticos y con el Foro Social. Nos reuniremos con todos los que quieran recibirnos, porque entendemos que ésta debe ser la última legislatura sin una investigación de estas características”, afirmaron.
La Red de Personas Torturadas hizo esta reclamación coincidiendo con el 38º aniversario de la muerte de Joxe Arregi en el hospital penitenciario de Carabanchel tras ser torturado por la Policía Nacional. Arregi, natural de Asteasu (Gipuzkoa), tenía 30 años y era miembro de ETA cuando falleció.
