pamplona - La petición del partido ultra Vox a la Junta de Andalucía de los nombres y apellidos de todas las personas que trabajan en los servicios contra la violencia de género para “fiscalizar y comprobar” las ayudas concedidas por el Gobierno andaluz en los últimos años ha tenido un antecende similar en Navarra, aunque referido a la educación.

El mes pasado de enero el parlamentario de UPN Alberto Catalán pidió al Departamento de Educación que confirmara si entre las personas contratadas para desarrollar el programa Skolae de igualdad había “personas vinculadas a EH Bildu y Geroa Bai”, lo que a su juicio probaba el “sesgo ideológico” del programa y suponía una prueba de “adoctrinamiento” en las escuelas. El claro gesto de estigmatización de los profesionales encargados de desarrollar el programa de educación en igualdad fue apoyado por por la presidenta del PPN Ana Beltrán, quien exigió los nombre de los los autores de las fichas de Skolae. Tras lograrlo, difundió sus identidades desacreditando su capacitación profesional por su ideología. El Gobierno de Navarra denunció la “una cazade brujas” hacia los autores de Skolae. - D.N.